Ultimo censo de CONAF: Quedan 127 cisnes en el Santuario de la Naturaleza

13 Julio 2006
Cifras indican que no hay recuperación del humedal, pese a las medidas restrictivas del Gobierno.
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Por: Aldea Comunicaciones
Sólo 127 cisnes de cuello negro quedan en las aguas del santuario de la naturaleza "Carlos Anwandter", de acuerdo al último censo realizado por la Corporación Nacional Forestal (Conaf) de Valdivia en el mes de junio, lo que evidencia que la población de esta ave símbolo de la ciudad de los ríos ha disminuido drásticamente en comparación con las mediciones realizadas por la misma institución en marzo de este año.
Esta información oficial incluye los ríos Pichoy, Cayumapu y San Antonio, que están fuera de los límites del santuario, lo que aumenta la cifra a 304 aves, debajo de los 335 que se contabilizaron en marzo.
BATALLA PERDIDA

El médico valdiviano, Eduardo Israel, puntualizó que las nuevas cifras entregadas por Conaf coinciden con las manejadas por el movimiento ciudadano Acción por los Cisnes.
La cantidad de cisnes es prácticamente inexistente y no hay recuperación en el santuario”, aseveró Israel, recalcando que la situación sigue siendo un desastre y que no mejorará mientras Celco no detenga la descarga de riles en la zona.
Para Israel, la pelea por los cisnes “se perdió” y ahora los esfuerzos deben enfocarse en detener la contaminación que están sufriendo los humedales y ríos de Valdivia. Estas aguas, según el médico, son ocupadas principalmente para el riego de campos y están conectadas a napas subterráneas.
Es cuestión de tiempo para que los mismos contaminantes que están ahí puedan llegar a las aguas subterráneas lo que puede afectar a las futuras generaciones. Ahora la pelea que tienen que dar los valdivianos es por el agua que regaran nuestros campos para las futuras generaciones”, aseguró.
Cabe recordar que censos realizados antes de la puesta en marcha de la planta de Celco, la cantidad de cisnes era cercano a los 6 mil ejemplares y las taguas eran alrededor de 30 mil, de las cuales hoy quedan sólo 98.
Sin embargo, desde la puesta en marcha de la planta de celulosa cambió la apariencia del humedal, al igual que la calidad de sus aguas, lo que fue confirmado por un estudio realizado por la Universidad Austral y encargado por la Conama.
Un nuevo estudio científico del geoquímico Sandor Mulsow logró vincular la desaparición del luchecillo, principal alimento de los cisnes, con los sulfatos presentes en los riles de la planta de celulosa.