Buenas conversaciones, buenos futuros
Ministra de Vivienda inauguró Debate sobre Acceso al Suelo Urbano
01 Diciembre 2006
Como gobierno estamos convencidos de que la segregación urbana es un menoscabo a nuestra democracia y empaña nuestros éxitos en materia económica, señaló Secretaria de Estado.
Adelantó que la próxima semana explicará a parlamentarios y a la Cá
Adelantó que la próxima semana explicará a parlamentarios y a la Cá
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Por Guillermo Adolfo Schweitzer
La ministra de Vivienda y Urbanismo Patricia Poblete sostuvo ayer que las condiciones marginales de los conjuntos de viviendas sociales chilenos “muestran con elocuencia la incapacidad del sistema para generar ciudades equilibradas, objetivo por lo demás básico del urbanismo”.
Puntualizó que el Gobierno está convencido de que la segregación urbana es “un menoscabo a nuestra democracia y empaña nuestros éxitos en materia económica”, al abrir los debates sobre el polémico tema del acceso al terreno en las ciudades, durante el seminario “Vivienda y Suelo Urbano: ¿Una Política de Estado?”, que cuenta con la participación de expertos nacionales y extranjeros.
En la inauguración de las discusiones -que se desarrollarán hasta hoy en la sede de la CEPAL- participaron también el Secretario ejecutivo Adjunto de la CEPAL, Ernesto Ottone, el Director Regional de UNIAPRAVI, Ramón Santelices, y Koldo Echeverría, representante del BID.
El dilema de cómo dar acceso equitativo al suelo ha cobrado especial relevancia en Chile a raíz de la nueva política habitacional puesta en marcha por el Gobierno, y su propuesta de hacer realidad la integración social y urbana de las familias más pobres.
Tras la ceremonia, la Ministra adelantó que el próximo lunes concurrirá se reunirá con los parlamentarios de las Comisiones de Vivienda de ambas Cámaras, para explicarles los alcances del proyecto de ley que prepara el Ejecutivo para asegurar espacio bien ubicado en la ciudad para la vivienda social. Asimismo -dijo- el martes se encontrará con integrantes de la Cámara Chilena de la Construcción, con el mismo fin.
Precisó Patricia Poblete que la iniciativa ya fue ingresada a la Secretaría General de la Presidencia e irá al Congreso en aproximadamente dos semanas más, manifestando su confianza en que logrará “un gran acuerdo nacional, para terminar con esta tremenda segregación que tenemos en Chile”.
Hacinamiento y conflicto social
A juicio de la Ministra, el seminario iniciado hoy es una extraordinaria oportunidad para enriquecer el debate sobre la materia en el país, “especialmente, cuando vivimos una evolución y maduración en nuestras políticas, donde al objetivo de dotar de una vivienda digna a quienes más la necesitan se han sumado con fuerza la calidad e integración social”.
En Chile –puntualizó -, la ciudad se ha transformado en una fuente de diferencias sociales y por eso resulta ineludible repensar nuestras políticas públicas de ciudades y promover la integración social desde la dimensión urbana. Aseguró que se trata de un imperativo ético que no se puede seguir postergando, especialmente porque en los últimos 40 años la distribución del ingreso no ha variado significativamente, a pesar de que el país ha tenido uno de los mejores y más sostenidos crecimientos de la economía a nivel mundial en las últimas dos décadas.
Junto con recordar que el reciente informe del PNUD situó al país en el lugar 17 entre aquellos con peor distribución de la riqueza, Poblete aseguró que las políticas públicas de vivienda han sido muy exitosas en revertir el déficit habitacional, “pero al mismo tiempo mantiene una gran deuda social”.
Al respecto reflexionó en que las zonas de las ciudades que tienen los mayores conflictos sociales son precisamente aquellas donde hay mayor cantidad de conjuntos de viviendas sociales, habitualmente desconectados o mal integrados con el resto de la ciudad. “No nos es grato reconocer que en Chile la desigualdad social tiene un fuerte componente territorial”, dijo y por eso el gran desafío es incorporar criterios de equidad a las políticas sectoriales, para que todos los ciudadanos accedan no sólo a viviendas dignas, sino también a barrios seguros y a ciudades con mayores niveles de integración”.
Mercado implacable
La Ministra calificó como implacable la dinámica del mercado en materia urbana, “porque no favorece la integración y promueve la separación de los más pobres, expulsando a quienes no tienen capacidad de compra a los suelos más baratos, generalmente en la periferia de la ciudad, lejos de las oportunidades para el desarrollo”.
Indicó que la experiencia chilena muestra cómo el desarrollo de las ciudades ha sido fuente de desintegración social y económica. “Es un círculo vicioso que perpetúa las desigualdades y aumenta la brecha entre ricos y pobres”, sostuvo.
A su juicio, la existencia de ciudades más integradas es un reclamo ciudadano que merece ser parte del estándar mínimo de urbanización. Según sostuvo, el país necesita una Política de Estado en Integración, en que vivienda y suelo sean un componente, además de educación, salud, trabajo, empleo, seguridad y transporte.
La Secretaria de Estado hizo presente además que para construir ciudades socialmente integradas, se necesita hacer un esfuerzo común y llegar a un acuerdo país. “Durante la última campaña presidencial, el tema de la desigualdad fue enarbolado por las cuatro candidaturas y todos coincidieron en que ésta era la principal tarea pendiente del desarrollo de Chile. Sin embargo, el sólo anuncio de un proyecto de ley de suelos que genere integración social ha despertado opiniones críticas, a pesar de que aún no se envía al Congreso, donde deberá discutirse como corresponde en toda democracia”, puntualizó la autoridad.
La Ministra de Vivienda y Urbanismo intervendrá también hoy en las discusiones con que culminará el encuentro de destacados expertos en urbanismo, economistas, agentes inmobiliarios, sociólogos, arquitectos, académicos, investigadores y autoridades sectoriales de distintas naciones de Europa y América Latina y España.
La ministra de Vivienda y Urbanismo Patricia Poblete sostuvo ayer que las condiciones marginales de los conjuntos de viviendas sociales chilenos “muestran con elocuencia la incapacidad del sistema para generar ciudades equilibradas, objetivo por lo demás básico del urbanismo”.
Puntualizó que el Gobierno está convencido de que la segregación urbana es “un menoscabo a nuestra democracia y empaña nuestros éxitos en materia económica”, al abrir los debates sobre el polémico tema del acceso al terreno en las ciudades, durante el seminario “Vivienda y Suelo Urbano: ¿Una Política de Estado?”, que cuenta con la participación de expertos nacionales y extranjeros.
En la inauguración de las discusiones -que se desarrollarán hasta hoy en la sede de la CEPAL- participaron también el Secretario ejecutivo Adjunto de la CEPAL, Ernesto Ottone, el Director Regional de UNIAPRAVI, Ramón Santelices, y Koldo Echeverría, representante del BID.
El dilema de cómo dar acceso equitativo al suelo ha cobrado especial relevancia en Chile a raíz de la nueva política habitacional puesta en marcha por el Gobierno, y su propuesta de hacer realidad la integración social y urbana de las familias más pobres.
Tras la ceremonia, la Ministra adelantó que el próximo lunes concurrirá se reunirá con los parlamentarios de las Comisiones de Vivienda de ambas Cámaras, para explicarles los alcances del proyecto de ley que prepara el Ejecutivo para asegurar espacio bien ubicado en la ciudad para la vivienda social. Asimismo -dijo- el martes se encontrará con integrantes de la Cámara Chilena de la Construcción, con el mismo fin.
Precisó Patricia Poblete que la iniciativa ya fue ingresada a la Secretaría General de la Presidencia e irá al Congreso en aproximadamente dos semanas más, manifestando su confianza en que logrará “un gran acuerdo nacional, para terminar con esta tremenda segregación que tenemos en Chile”.
Hacinamiento y conflicto social
A juicio de la Ministra, el seminario iniciado hoy es una extraordinaria oportunidad para enriquecer el debate sobre la materia en el país, “especialmente, cuando vivimos una evolución y maduración en nuestras políticas, donde al objetivo de dotar de una vivienda digna a quienes más la necesitan se han sumado con fuerza la calidad e integración social”.
En Chile –puntualizó -, la ciudad se ha transformado en una fuente de diferencias sociales y por eso resulta ineludible repensar nuestras políticas públicas de ciudades y promover la integración social desde la dimensión urbana. Aseguró que se trata de un imperativo ético que no se puede seguir postergando, especialmente porque en los últimos 40 años la distribución del ingreso no ha variado significativamente, a pesar de que el país ha tenido uno de los mejores y más sostenidos crecimientos de la economía a nivel mundial en las últimas dos décadas.
Junto con recordar que el reciente informe del PNUD situó al país en el lugar 17 entre aquellos con peor distribución de la riqueza, Poblete aseguró que las políticas públicas de vivienda han sido muy exitosas en revertir el déficit habitacional, “pero al mismo tiempo mantiene una gran deuda social”.
Al respecto reflexionó en que las zonas de las ciudades que tienen los mayores conflictos sociales son precisamente aquellas donde hay mayor cantidad de conjuntos de viviendas sociales, habitualmente desconectados o mal integrados con el resto de la ciudad. “No nos es grato reconocer que en Chile la desigualdad social tiene un fuerte componente territorial”, dijo y por eso el gran desafío es incorporar criterios de equidad a las políticas sectoriales, para que todos los ciudadanos accedan no sólo a viviendas dignas, sino también a barrios seguros y a ciudades con mayores niveles de integración”.
Mercado implacable
La Ministra calificó como implacable la dinámica del mercado en materia urbana, “porque no favorece la integración y promueve la separación de los más pobres, expulsando a quienes no tienen capacidad de compra a los suelos más baratos, generalmente en la periferia de la ciudad, lejos de las oportunidades para el desarrollo”.
Indicó que la experiencia chilena muestra cómo el desarrollo de las ciudades ha sido fuente de desintegración social y económica. “Es un círculo vicioso que perpetúa las desigualdades y aumenta la brecha entre ricos y pobres”, sostuvo.
A su juicio, la existencia de ciudades más integradas es un reclamo ciudadano que merece ser parte del estándar mínimo de urbanización. Según sostuvo, el país necesita una Política de Estado en Integración, en que vivienda y suelo sean un componente, además de educación, salud, trabajo, empleo, seguridad y transporte.
La Secretaria de Estado hizo presente además que para construir ciudades socialmente integradas, se necesita hacer un esfuerzo común y llegar a un acuerdo país. “Durante la última campaña presidencial, el tema de la desigualdad fue enarbolado por las cuatro candidaturas y todos coincidieron en que ésta era la principal tarea pendiente del desarrollo de Chile. Sin embargo, el sólo anuncio de un proyecto de ley de suelos que genere integración social ha despertado opiniones críticas, a pesar de que aún no se envía al Congreso, donde deberá discutirse como corresponde en toda democracia”, puntualizó la autoridad.
La Ministra de Vivienda y Urbanismo intervendrá también hoy en las discusiones con que culminará el encuentro de destacados expertos en urbanismo, economistas, agentes inmobiliarios, sociólogos, arquitectos, académicos, investigadores y autoridades sectoriales de distintas naciones de Europa y América Latina y España.
