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Enseñar a los adultos el manejo de las nuevas tecnologías, especialmente la informática, es ciertamente de interés, y la campaña de alfabetización digital en Arica puede satisfacer las demandas de una población adulta no informatizada pero alfabeta. Sin embargo, cabría preguntarse ¿cuántos analfabetos reales y/o funcionales hay todavía en Arica? No sería importante la detección y alfabetización de la población analfabeta, si la hubiera? ¿no sería de mayor relevancia que no quedara ningún analfabeto en la ciudad? En momentos en los que se está intentando acabar con el analfabetismo en muchas ciudades y países de latinoamérica de forma solidaria y altruista, me parece que la alfabetización de adultos no debería descuidarse en ningún lugar. Otras preguntas que se me ocurren en relación a la nota publicada el 17 de Diciembre son ¿porqué es una Fundación la que realiza la campaña? ¿tiene algún interés económico la Fundación Mercator? ¿cuáles son sus actividades? ¿realiza esa Fundación actividades de alfabetización "no digital" o lo ha hecho anteriormente? ¿porqué no se realiza el proyecto de alfabetización digital desde un organismo público? Todas éstas cuestiones me han surgido de la lectura de la nota referida, y creo que sería de interés aclarárselas a los lectores.