Hacer un comentario

Orientaciones Sobre Tratamiento y Rehabilitación

08 Mayo 2006
Completamos nuestro anterior artículo dando elementos de rehabilitación y de evaluación de los programas que se ofrecen en relación con las adicciones
Pedro Naveillan >
authenticated user Corresponsal
10.- ¿Qué es la rehabilitación?
Hay que señalar de partida que tratamiento y rehabilitación no son la misma cosa aunque se complementan y debieran formar parte de todo enfoque terapéutico.
El tratamiento apunta a lo que está enfermo mientras que la rehabilitación a lo que está sano en el paciente para, mediante ello, compensar las falencias o minusvalías que hay en él.
Un ejemplo permitirá comprender mejor esto. Si un paciente diestro ha perdido su brazo derecho, el tratamiento consistió en la amputación del brazo (o la reparación de las parte no dañadas para salvarle la vida). Le rehabilitación es el desarrollo de las habilidades del brazo izquierdo, la colocación de una prótesis y capacitación en su adecuado uso que permita compensar lo mejor posible el brazo perdido de modo tal que quede con el menor grado de invalidez o incapacidad posibles. En el momento del diagnóstico y tratamiento, el médico debe estar pensando en términos de rehabilitación y proponiéndose dejar un muñón útil para la futura prótesis.
En el sujeto dependiente hay que evaluar sus capacidades físicas, psicológicas, sociales y laborarles al igual que el estado en que éstas se encuentra por efecto de su carrera en el abuso de substancias. Ver y esforzarse en restituirlas en la medida de lo posible. Hay que evaluar también lo que está indemne y lo que ha estado en estado potencial, sin ser utilizado (ej, capacidades laborales por falta de instrucción, etc.).
Generalmente se encuentra afectada la autoestima, la dignidad, la confianza en la propias capacidades, el sentido de su vida, aspectos que hay que desarrollar y/o restaurar.
Otro punto importante a considerar es la capacidad de obtener placer, de realizaciones, de ser feliz. Esto se estaba logrando, habitualmente, con la droga o tapando su ausencia. Hay que ayudarlo a desarrollar nuevas actividades que suplan sanamente la carencia de éstas (es decir, que le proporcionen otras fuentes de placer y de sentido de la vida) al dejar la droga: una persona feliz difícilmente recurrirá a los paraísos artificiales.
Lo espiritual ayuda especialmente en la obtención de estos logros y es una parte importantísima de la rehabilitación.

11.- ¿Cómo evaluar los programas de tratamiento y de rehabilitación que se ofrecen en el mercado de la salud?
11.1.- Eficacia: Se refiere a la efectividad del tratamiento respecto de la enfermedad, es decir, a los resultados que se logran con él.
Para poder formarse una idea respecto de ella es necesario considerar varios factores:
a) Evolución espontánea:
La enfermedad puede tener una tendencia más o menos grande a la recuperación sin que medie ningún tratamiento. Si se ha realizado éste, no se le pueden atribuir todos los buenos resultados sino que sólo aquellos que superan los resultados que se habrían obtenido espontáneamente y sin mediar ningún tratamiento. Un ejemplo de lo anterior es el siguiente: un 7% de los alcohólicos se recuperan solos (dejan de beber por años o por toda la vida) sin mediar tratamiento alguno. Si un centro de tratamiento o una técnica o un profesional sostiene que el recupera al menos el 7% de estos pacientes está manifestando que su tratamiento no añade nada nuevo a la evolución espontánea; si recupera un porcentaje menor significa que su tratamiento está más bien perjudicando; y si su porcentaje de recuperación es significativamente mayor que el 7% (digamos el 30% o más), de algo sirve y es más útil en la medida que este porcentaje sea mayor.
Esto hace desconfiar o poner en duda los testimonios de las personas que aseguran que un tratamiento o un profesional dado es la panacea para la enfermedad que él ha sufrido o sufre. Es posible que no se trate más que de la recuperación espontánea. Es por esto que siempre habrá testimonios favorables para lo que, debidamente evaluado, se demuestra que de nada sirve. Claro que también hay testimonios que son legítimos y bien fundados.
b) Diagnóstico acertado:
Hay que tener cuidado con las estadísticas de recuperación de pacientes en relación con los criterios utilizados para la definición del caso o paciente aceptado al tratamiento.
Cuando se incluyen como casos a todas las personas que consumen drogas, se está aceptando personas muy heterogéneas tanto en lo que refiere a si son realmente enfermos (dependientes), al tipo de drogas utilizadas (tranquilizantes, marihuana, cocaína, opiáceos, etc.) cuyo consumo puede tener de suyo distinto pronóstico.
Es así como un usuario de drogas puede ser un simple usuario ocasional y no dependiente, una persona que abusa ocasional o habitualmente o un sujeto dependiente de la droga, o sea, realmente un drogadicto. Si bien, popularmente, se usa el término de adicto para cualquier tipo de consumo, esto no es médicamente correcto, como los señaláramos más arriba.
El pronóstico de estas diferentes forma de uso no es el mismo, lo que hace aconsejable, al momento de evaluar los resultados del tratamiento que ofrecen diferentes centros, conocer la composición de las personas a las que están referidas sus estadísticas.
c) Resultados.
¿Se incluyen en el conjunto de las personas a las que se refieren los resultados a todos los que recurrieron al centro o profesional por tratamiento? ¿a todos los que aceptaron tratarse una vez que consultaron? ¿a todos los que iniciaron el tratamiento aunque no lo hayan completado? ¿sólo a los que lo completaron?.
Cambian los números del denominador (el Nº total al cual se refiere el porcentaje) según sea el caso, el que siendo menor hace que los resultados aparezcan porcentualmente como mejores.
¿Cuánto dura el tratamiento propuesto? ¿cuándo se da por terminado el tratamiento? Es sólo a partir de ese momento en que puede comenzar a medirse el éxito o fracaso del mismo ¿Fueron seguidos todos los pacientes al término del tratamiento? ¿Cuántos se perdieron en el seguimiento? ¿por cuánto tiempo fueron seguidos?
Sólo después de al menos dos años sin recaídas (de abstinencia), idealmente de cinco, puede estimarse que el tratamiento de la dependencia ha sido un éxito.
Sin embargo, no hay que desconocer lo positivo que es que, pese a que sigan habiendo recaídas en este periodo, se pueda hablar de un éxito parcial si éstas son menos frecuentes, de menor duración o no tan graves después del tratamiento. Lo mismo si el paciente ha mejorado en lo laboral, familiar, social pese a no haber abandonado del todo la droga.
Hay que retener que la dependencia de drogas es un enfermedad crónica, como la diabetes o la hipertensión arterial, y que pese al tratamiento, por adecuado que éste sea, suelen haber recaídas que hay que tratar oportunamente.
11.2.- Costo:
a) Moral:
Tiene un costo moral, en el sentido psicológico espiritual, no sólo para el paciente sino que también para los familiares y los individuos de su contexto socio-económico, los que se verán involucrados en mayor o menor grado según sea la terapia indicada. Toda terapia debe incluirlos de algún modo pero el grado de inclusión es variable, yendo de alguna entrevista ocasional con alguno de ellos a ser sometidos también a terapia según el enfoque que se utilice.
Hay terapias, que no me parecen convincentes, que involucran a toda la familia, con un elevado costo moral y económico
. Antes de caer en ellas, es conveniente someterlas a evaluación según lo señalado en el punto anterior.
b) Económico:
El tratamiento y la rehabilitación tienen un costo económico que, habitualmente, hasta ahora, no es cubierto por las Isapres.
El precio de los tratamientos es muy variable y depende si es ambulatorio o no, de los profesionales participantes y si se trata o no de un trabajo en equipo, del tipo de psicoterapia empleada y si esta es grupal o individual, de los medicamentos utilizados, de las patologías subyacentes al problema de la droga, etc.
En el caso de los tratamientos individuales dados por un psiquiatra, hay considerar, al menos, una sesión semanal por algunos meses, luego una frecuencia menor y variable.
Hay establecimientos y grupos de profesionales que venden programas en paquete con una duración que puede ser de hasta dos años. Suelen exigir firma de documentos para asegurar el pago del paquete, los que no suelen ser anulables ni reembolsables si el paciente lo abandona: se tiene que seguir pagando, práctica éticamente muy discutible.
Aconsejamos evaluar muy cuidadosamente las condiciones económicas y la eficacia de lo propuesto antes de embarcarse en un programa de esta especie.
Se ofrecen también programas gratuitos o semigratuitos por instituciones, las que igualmente deben ser evaluadas de acuerdo con los parámetros que hemos dado en este punto 11 y lo que indicaremos a continuación.
12.-Centros de tratamiento, rehabilitación, casas de acogida y similares:
A demás de los parámetros de evaluación que hemos dados anteriormente,
debe considerarse lo siguiente:

a) Equipo profesional:
Cerciorarse de que cuente al menos con un médico psiquiatra con experiencia en el tratamiento y rehabilitación de los dependientes de substancias psicoactivas.
Muchos de ellos no cuentan con este profesional o no tienen ningún médico, lo que hace que estén ejerciendo ilegalmente la medicina, lo que está sancionado por el Código Sanitario, de cuyo cumplimiento no parece que se preocupan debidamente las autoridades encargadas de velar por él.
b) Antecedentes:
Indagar al respecto. Como ya lo señaláramos anteriormente, el que haya personas que manifiesten que se han recuperado gracias a alguno de ellos es algo que debe ser cuidadosamente evaluado: muchas veces sirven de señuelo para atraer clientes, sin contar con la debida idoneidad.
Hay algunos de estos, que creemos la minoría, sobre los que tenemos antecedentes de faltas graves a la ética y de explotación de los pacientes y de sus familiares, siendo uno de ellos perseguido por la justicia en otros países.
Hay que recordar que no es oro todo lo que reluce y, por tanto, ser cauto y estricto en la selección.

Responder

El contenido de este campo se mantiene privado y no se mostrará públicamente.

Aqui podría estar su imagen. para registrarse, haga clic aquí.

Código de seguridad
Queremos saber si eres una persona y no un robot, por eso responde este siguiente formulario.