Hacer un comentario

Megaproyecto para llevar agua al norte

14 Noviembre 2010
Un tubo submarino de 1.000 kilómetros busca poner fin a la escasez de agua en el norte. Las mineras Collahuasi y BHP Billiton han sido contactadas como potenciales clientes. Por Gloria Delucchi
Gloria Delucchi >
authenticated user Corresponsal

El grupo constructor francés Vinci y la Fundación Chile impulsan un proyecto de US$ 3.850 millones, para llevar agua desde los ríos de la zona central al norte. La iniciativa ha sido apoyada por el gobierno de Nicolas Zarkozy y despierta el interés de las mineras en el país.

Una parte importante de los US$ 50 mil millones en proyectos mineros que hay en Chile de aquí a 2020 enfrenta un dilema crucial: la falta de agua en el norte. Hasta ahora la única opción ha sido desalar agua de mar. Pero el grupo francés Vinci, un gigante de 160.000 empleados y dueño de la mitad de las carreteras concesionadas de Francia, se unió a la Fundación Chile, a través de su filial Vía Marina, para impulsar una megatubería submarina de al menos 1.000 kilómetros, que permitiría llevar agua de la zona central al norte del país, a la mitad del precio de las desaladoras. Si la idea prospera, Chile haría historia al construir el primer ducto submarino para trasladar agua por sobre el lecho oceánico.

De tal envergadura es la iniciativa, que el gobierno de Nicolas Sarkozy está dispuesto a cofinanciar los estudios de prefactibilidad. El tema se está tratando al más alto nivel e incluso, se habló de él en la gira del Presidente Sebastián Piñera a Europa, específicamente en el encuentro con los empresarios galos en París.

El proyecto se llama AcquaAtacama y consta de tres fases, explican Marcela Angulo, gerente de Medio Ambiente y Energía de Fundación Chile, y Patricia Pacheco, ex ejecutiva del grupo Enersis y Esval y ahora directora de negocios tecnológicos en Fundación Chile.

Implicaría una inversión global de hasta US$ 3.850 millones. En la primera fase, con US$ 850 millones de desembolso, llevaría cinco metros cúbicos por segundo de agua hasta Copiapó (unos 1,300 kilómetros). Como referencia, “esa cantidad equivale a abastecer de agua fresca a dos Chuquicamata”, expresa Jorge Candia, ex director de Codelco.

En la segunda etapa, por US$ 2.500 millones, llegaría a Antofagasta (otros 700 kilómetros), adicionándose 10 metros cúbicos. En la tercera parte, por US$ 500 millones, arribaría a Iquique, añadiéndose cinco metros cúbicos.

Si todo marcha bien, el proyecto podría empezar a materializarse en cuatro o cinco años y la instalación del tendido podría tomar dos años. El agua podría ser usada en faenas mineras, industriales y agrícolas y, si es tratada, en consumo humano.

“Si bien hay ductos por el mar que llevan desde cables hasta petróleo o gas, nunca han llevado agua a distancias tan grandes, destaca el ex ministro de Obras Públicas Eduardo Bitrán, quien recibió y estudió el proyecto cuando éste llegó a su cartera hace tres años. “Nunca en la historia del mundo y de Chile el agua había sido tan escasa, por eso transportarla es un buen negocio. El agua es el oro del futuro”, dice Pacheco.

Otro aspecto que hace única esta iniciativa es la tecnología denominada “sumariver”, una fibra resistente a las presiones marinas, al roce con el sustrato oceánico e incluso, al cambio de presión del agua que transporta. Además, es flexible y, al mismo tiempo, altamente resistente, agrega Angulo.
Esta suerte de manguera de última generación tendría entre dos a cuatro metros de diámetro e iría flotando en el lecho marino, anclada y sujeta con una especie de huincha cada cierta distancia. Por diseño estaría a 200 metros de profundidad y a una distancia variable de la costa, para no interferir con otras actividades o ecosistemas protegidos.
Vinci-Vía Marina y Fundación Chile ya han tomado contacto con mineras que serán potenciales clientes, como BHP Billiton y Collahuasi, y con grandes gremios como el Consejo Minero y la Sonami. Estas últimas entidades han hablado con el titular de esa cartera, Laurence Golborne. También han tenido contactos con el ministerio de OO.PP.
El anteproyecto ya está listo y sus promotores se preparan ahora para comenzar los estudios de prefactibilidad. En forma paralela, los gremios mineros y AcquaAtacama están iniciando las gestiones para que la obra sea declarada de “interés público” y que ingrese a la cartera de concesiones, lo que facilitaría su materialización.
El interés en las mineras es grande. “La disponibilidad de agua es un factor crítico en la minería”, resume Roberto Camacho, de la comisión de Recursos Hídricos de Sonami-Consejo Minero. Los mineros están pagando precios exorbitantes por el agua, detalla Eduardo Bitrán.
Fuente:-
La Tercera

Responder

El contenido de este campo se mantiene privado y no se mostrará públicamente.

Aqui podría estar su imagen. para registrarse, haga clic aquí.

Código de seguridad
Queremos saber si eres una persona y no un robot, por eso responde este siguiente formulario.