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Ufff, finalmente aparecen dos dedos frente y fue el dueño de la minera, nuestras leyes lo habrián dejado contaminar. Que verguenza de ley ambiental.

Valió la pena funarse con unos pulentos y soberbios.

A los que critican y peor aún desde el anónimato, al menos aporten con una idea alternativa de coscenso antes de ofender.