Las fuerzas israelíes habrían capturado a Ibrahim Hammad, de 41 años, descrito como el jefe del brazo armado de Hamas en Cisjordania.
Hammad, residente del pueblo de Siluad, que era buscado desde hace ocho años, es acusado por la muerte de más de 60 israelíes en ataques suicidas en Jerusalén, entre ellos en dos bares y hace tres años en la cafetería “Frank Sinatra” de la Universidad Hebrea.
También está acusado de planear ataques contra la infraestructura ferroviaria de Israel y contra depósitos de gas.
Un coronel israelí involucrado en el operativo dijo a la radio del ejército que Hamas tendrá problemas para reemplazar a Hammad, expresando “Lo que lo hacía especial era su creatividad para encontrar maneras complejas de atacar a los israelíes”.
El portavoz de Hamas, Sami Abu Zuhri, afirmó que el arresto no perjudicará las capacidades del grupo militar islámico, indicando “El (Hammad) no será ni el primero ni el último líder de la resistencia en ser arrestado o martirizado”.
La acción del ejército israelí contra Hamas es algo relativamente inusual, ya que las fuerzas de seguridad están centrando sus esfuerzos en luchar contra otro grupo militante, la Jihad Islámica, que rechazó un alto al fuego en la mayor parte de los últimos ataques.
El ejército israelí también arrestó a dos miembros de la Jihad Islámica y a cinco supuestos militares de la facción Fatah del Presidente Mahmoud Abbas en la ciudad de Belén, en Cisjordania.
OLMERT EN ESTADOS UNIDOS
El operativo de produce en momentos en que el Primer Ministro israelí, Ehud Olmert, se encuentra de visita en Estados Unidos para reunirse con el Presidente George W. Bush., en el que será el primer encuentro entre ambos desde que el líder israelí fue electo el mes pasado.
Se espera que el principal punto de agenda sea el plan israelí de una retirada unilateral de Cisjordania y la situación de seguridad en Gaza. Igualmente discutir el programa nuclear de Irán.
Tanto EE.UU. como Israel buscan una estrategia para lidiar con el nuevo gobierno palestino bajo el control de Hamas, quien ha rehusado renunciar a la violencia y reconocer al Estado israelí.
Israel y Estados Unidos están de acuerdo que no se puede negociar con Hamas, pero el gobierno de Bush espera poder sostener negociaciones con el Presidente palestino.
Olmert afirma que los asentamientos judíos en Cisjordania hogar de millones de palestinos, constituye una amenaza a la existencia del Estado de Israel como un estado judío y que por lo tanto Israel deberá crear fronteras deseables, decididas unilateralmente, manteniendo a los grandes asentamientos como una parte por siempre separada del Estado de Israel.