Diferentes reacciones tuvo la campaña para prevenir el SIDA que el gobierno lanzó esta semana.
Los primeros en hacerse escuchar fueron los candidatos presidenciales, cuyas reacciones que permitieron hacer algunas definiciones valóricas entre ellos. Michelle Bachelet puso énfasis en el deber del estado de informar sobre los peligros. Y si bien estuvo de acuerdo con que la fidelidad y la abstinencia son métodos eficaces, defendió el derecho de quienes no cumplen esas cualidades de estar protegidos del SIDA también, por lo cual defendió el énfasis puesto en el uso del preservativo.
Por su lado, Joaquín Lavín señaló que "Creo que el tema del Sida es muy grave. Nosotros tenemos que atajarlo. Me habría gustado, en lo personal, una campaña que educara, más que polemizara y que uniera más que dividiera. Está demasiado centrada en un solo método". Más duro en cambio fue Sebastián Piñera, quien manifestó que la campaña sería "una verdadera oda al condón", aunque con conclusiones más conciliadoras, ya que a su juicio era favorable que el estado promoviera este tipo de campañas, y que ésta "puede y debe ser mejorada".
Iglesia
Sin embargo, las palabras que más causaron desconcierto fueron las del presidente de la Conferencia Episcopal Chilena, el obispo de Rancagua Alejandro Goic Karmelic. Desconcierto porque por un lado criticó la actitud de esta campaña, por centrar toda la prevención en el uso de un solo medio(y así socavar la libertad de las personas para elegir), y porque por el otro hizo una fuerte crítica a los medios nacionales(Canal 13.y Mega.) que se negaron a ser parte de la campaña. El obispo los acusó de inconsecuentes, puesto que su programación no sería acorde con la actitud de rechazar la campaña.
En una entrevista radial el prelado señaló que "Acepto y respeto el derecho que tiene un medio de comunicación de no aceptar una propaganda que contradice los valores de la línea editorial, pero evidentemente que hay inconsecuencias y que no son aceptables". El obispo Goic señaló también que "en el pasado nos criticaban porque defendíamos la dignidad humana de aquellos que la torturaban, hoy defendemos la dignidad humana de aquellos que quieren banalizar algo tan fundamental como es la sexualidad y la relación entre las personas".
Sus palabras hacen eco justo cuando la empresa Adimark publicó una encuesta que realizó a todo el universo católico, donde señaló que el 95% de los católicos estaría a favor de usar el preservativo como método de prevención del SIDA.