Es bueno recordar a Rosseau y también a Marat, Dantón y Robespierre, no olvidarse del baño de sangre, anarquía y asesinatos que fue la Revolución Francesa, un estallido fomentado por incendiarios y sádicos que usaron el nombre del pueblo para sembrar el terror.Malo el ejemplo y bien pobres han sido los resultados históricos del asambleismo, donde se toman acuerdos en multitud y a mano alzada imponiéndose la voluntad de los que gritan más fuerte. La revolución francesa debería ser recordada con verguenza, tal como los gobiernos de los nazis y los bolcheviques o el Pot Pol, pero siempre han existido especialistas en torcer la historia.
Probablemente nunca fueron más felices los franceses que cuando se deshicieron de esa camarilla de sádicos y sinverguenzas. Si es por ejemplos, la Carta Magna o la Constitución de los Estados Unidos. Pésimo ejemplo me parece el de la revolución francesa.
Es bueno recordar a Rosseau y
Es bueno recordar a Rosseau y también a Marat, Dantón y Robespierre, no olvidarse del baño de sangre, anarquía y asesinatos que fue la Revolución Francesa, un estallido fomentado por incendiarios y sádicos que usaron el nombre del pueblo para sembrar el terror.Malo el ejemplo y bien pobres han sido los resultados históricos del asambleismo, donde se toman acuerdos en multitud y a mano alzada imponiéndose la voluntad de los que gritan más fuerte. La revolución francesa debería ser recordada con verguenza, tal como los gobiernos de los nazis y los bolcheviques o el Pot Pol, pero siempre han existido especialistas en torcer la historia.
Probablemente nunca fueron más felices los franceses que cuando se deshicieron de esa camarilla de sádicos y sinverguenzas. Si es por ejemplos, la Carta Magna o la Constitución de los Estados Unidos. Pésimo ejemplo me parece el de la revolución francesa.