Como todos los años, el Día Mundial del Sida, nos invita a pensar juntos dónde estamos y hacia dónde podemos ir en la busqueda de la respuesta frente al Vih y al Sida. 

Hablar de VIH no es solo hablar de un virus, es también hablar de derechos que son vulnerados, de diferentes formas de ejercer la sexualidad, de desigualdades de género, a la falta de una legislación que permita dignificar a las personas transgéneras/os, de la falta de acceso a la salud o a la educación.

Es hablar de las más de 40.000 personas que en nuestro país viven con el virus, de las cuales la mitad de ellos desconoce su situación. Es hablar de una enfermedad PREVENIBLE, de la cual solo en Arica se siguen notificando 50 personas al año; y de una enfermedad TRATABLE por la cual siguen falleciendo personas al desconocer su condición serológica y ser notificadas en una etapa tardía. Las estadísticas muchas veces nos hacen olvidar que hablar de VIH es también contar la historia de un amigo, amiga, de un compañero o compañera de trabajo, de una pareja, es también hablar de nuestra propia historia...

En la Organización Juntos por la Vida estamos convencidos desde hace 13 años de que solo podremos dar respuesta a la epidemia trabajando todos los días como si fuera el Día Mundial de Respuesta al Vih y al Sida. Pero también sabemos que esto no podemos hacerlo solos ni solas.

Por eso, este 1 de diciembre te invitamos a decir YO RESPETO. Para decir YO RESPETO necesitás más de uno. Porque no existe RESPETO sin los demás. Es invitar a que los demás se sumen y, entre todos, formemos una voz más grande. La lucha contra el VIH y el Sida necesita esta voz, te necesita a ti.

Y así, entre todos y todas,  podremos tomar conciencia de la epidemia de nuestro tiempo que, juntos y juntas, podemos concientizar y no discriminar.