Es nuestro Carnaval Con la fuerza del Sol

04 Febrero 2020

Desde tiempos conmemorables hasta la actualidad, la celebración andina en nuestra ciudad ha logrado una transformación cultural, sin precedentes.

Pablo Valcarce Bravo >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

Es nuestra región, pero principalmente nuestra ciudad la que se lleva los honores, de albergar cada año, este magno evento, donde participan alrededor de 16.000 personas de distintos países de sudamerica, repartidos entre bailarines, músicos y “pepinos” (quienes se encargan de entregar las esperadas travesuras del evento). Actividad que acarrea cerca de los 100.000 espectadores que participan de ella, durante los 3 días

 El ariqueño siente un inmenso  respeto frente a esta actividad, porque ha logrado entender y hacer suyo, el orgullo de traer consigo las raíces ancestrales, dándole culto al Dios Sol, ya que entiende que Él es quien nos ofrece la vida. Es un acto de reconocimiento que ensalza la vida y la agradece en todo su contexto.

La difusión mediática que esto conlleva es de sumo interés nacional, ya que se ha posicionado en la retina del ciudadano y pasante. Se comprende la importancia y trascendencia local, ya que posiciona a nuestra ciudad como la Capital Nacional en donde se encuentran las distintas culturas ancestrales  ha realizar su oda.

La Gestión Municipal, al centrar sus recursos, atención logística y conciencia ciudadana a generado una gran expectativa ciudadana hacia esta institución pública. Ante todo evento, no podemos desconocer lo que ha acarreado consigo, este importante apoyo, ya que se ha generado  a través de los distintos protagonistas una gran imagen cultural y local de nuestra región.

Es cuando hoy existe una explosión de colores, sonidos y danzas culturales, en el  corazón de nuestra sociedad, y no menor, terminando la comparsa a los pies de Nuestro Morro imponente, quien es “símbolo de gloria, paz y lealtad”. La expectación local frente al desarrollo de nuestra ciudad, asumiendo ante si, el ADN cultural andino, el néctar  costero, la historia patriota y la cultura prehistórica, nos entrega  buenos presagios del futuro local