Relatos Sonoros: La pasión por la música hecha estilo de vida

De la música no sólo se vive tocando, hay otras oportunidades para desarrollarse dentro de este hermoso mundo sonoro.

Giancarlo Nattino, destacado guitarrista de la banda Egregor y músico de sesión para Eingell Baltra, nos cuenta cómo fue con el tiempo enamorándose del cuidado de los instrumentos, de sus ajustes y de qué manera esto se transformó en uno de sus sustentos de vida, en una ciudad pujante a nivel musical.

Además del cuidado a los instrumentos, Giancarlo también se dedica a la producción de eventos musicales, como asistente de escenario o coordinador de piso, labores que fue aprendiendo en esta gran escuela de producción musical que fue la extinta Asociación de Bandas de Arica.

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