“Codelco se roba el cobre, por eso Calama es pobre”, gritaba el conjunto de ciudadanos y trabajadores en el Parque de Los Lolos, este 29 de junio.

02 Julio 2011

Desde Calama por Juan Pablo Rejas

Juan Pablo Rejas >
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Los humos de las usinas de Chuquicamata,  a lo lejos,  daban a entender que todo seguía igual, salvo por la falta de taxis colectivos, que delataban que el malestar se hacía presente en la Ciudad de Calama.

“El paro es porque aquí no se queda la plata que genera el cobre, las calles están en mal estado y con hoyos,….”  ¿Y usted no trabaja en minería? Le pregunté…” Sí, yo trabajo en el Abra, pero allá ayer avisaron que había que trabajar doble turno”, comentó el improvisado chofer de un Hyundai Accent color plata y que aprovechaba el momento para taxear esta mañana.

La ciudad amaneció fría y con sol, como si fuera subiendo de temperatura  junto con las movilizaciones, solo en las proximidades del centro la fuerza pública desviaba a los pocos vehículos de las calles.

Queriendo saber un poco más de las demandas de los calameños, aproveché la sobre mesa del casino de uno de los proyectos mineros, las post púberes trabajadoras contratistas  Hilda y Catherine, calameñas de nacimiento, apoyaban el paro exigiendo mejores lugares de esparcimiento y de acceso gratis para la comunidad, mencionaron que en el Camping Extracción, le cobraban por entrada, por bañarse y por los paseos a caballo y que debería existir otro lugar más amplio y gratis para los fines de semana.

En tanto que la Sra Lucia, calameña y trabajadora desde los 15 años, según sus declaraciones, pedía acelerar la construcción del Hospital y que existiera una universidad de la ciudad. Pero las demandas no solo quedaban ahí,  seguía Hilda, un estadio de fútbol también, a la altura del Gran Cobreloa.

Entre tanto, la radio gritaba en conjunto con un dirigente, exigiendo no solo una ayuda puntual, sino una permanente inyección de recursos, a través de la llamada Corporación del Norte, financiada con dineros  de una especie de royalty a las empresas mineras de la región, más alto que el actual, para financiar proyectos en un tipo de Junta de Adelanto Calameña.

Tienen razón los calameños, a su ciudad le faltan algunos arreglos, estando aquí en la Capital del Cobre, recuerdo con nostalgia lo afortunado que somos en la ciudad de la Eterna Primavera, esas demandas de obras públicas ya las superamos hace rato, solo nos falta una….

Que nuestras autoridades aprendan a conjugar el verbo trabajar, clamor que no  han sabido satisfacer ni los de ahora ni los de antes. “Atención jóvenes, repitamos…..Yo trabajo, Tú trabajas, Ellos trabajan, Nosotros trabajamos y Ustedes trabajan.”