Una muestra espectacular donde se conjugan las diferentes expresiones artesanales de nuestro país, América Latina y el mundo. Por Cristian Brandau Fotos: Cristian D. Fonseca
Titulo Exterior:
Feria Internacional de Artesanía de Arica
Una muestra espectacular donde se conjugan las diferentes expresiones artesanales de nuestro país, América Latina y el mundo.<b> Por Cristian Brandau Fotos: Cristian D. Fonseca</b>
Ubicada en el primer tramo del paseo peatonal 21 de mayo, esquina Pedro Montt, se convierte en una experiencia que año a año sorprende e impacta a los ariqueños y turistas que visitan la región. Este 2010 la feria fue inaugurada el 28 de mayo y estará hasta este domingo 13 en nuestra ciudad, donde se pueden encontrar diferentes formas de hacer artesanía y una gran variedad de materias primas con las que los artesanos trabajan. Fierro, fibra de alpaca, distintos tipos de madera, hasta huevos de avestruz podrán encontrar en esta muestra de trabajos que presenta instalaciones de perfectas para la ocasión.
Como corresponsal me di el lujo de poder acercarme a diferentes artesanos y poder escuchar e informarme sobre sus métodos de trabajo, sus inspiraciones, sus ideales y sus impresiones sobre esta feria que se realiza año a año en Arica.
Comenzando este pequeño recorrido me encontré con una maravilla que nunca había tenido la oportunidad de presenciar, un trabajo en fierro y desechos que logran una hermosura sorprendente. Este es el trabajo de Mauricio Codoceo Urrutia, oriundo de La Serena, que se presenta cada año esta feria. Nos cuenta que su trabajo consiste en rescatar cosas que ya no sirven, que no tienen utilidad y darles vida. “Mi oficio es soldador y empecé a desarrollar esto con la finalidad de quedarme en mi casa y ver crecer a mi hijo no tanto ganar dinero, estamos claro que las personas que se dedican al arte o artesanías no se van a hacer millonarios, pero prefiero estar en la casa con ellos y si salimos a trabajar salimos juntos”.
Su arte rescata cosas de la vida diaria, se pueden ver figuras hechas con clavos, tuercas que representan situaciones tan cotidianas como cocinar, el borrachito que entra a la casa y la señora lo está esperando para retarlo, hasta una escultura hermosa de Lautaro sobre un caballo, el cual tiene un acabado de oxido que hace que se destaquen sus facciones. El está ubicado al comienzo de la feria a mano izquierda bajando por 21 de mayo.
Sus precios van desde $1500 pesos que cuestan estas pequeñas figuras, hasta $280.000 que cuesta esa figura de Lautaro, la cual tendría en mi living sin ninguna queja.
“Como te decía antes, mi intención no es hacerme millonario con esto, pero ver como se impresiona la gente con mi trabajo me llena el alma, es como el aplauso para un cantante, te sientes pleno”
Continuando con mi paseo me encuentro con otra maravilla, una artesana trabajando in situ en un telar. Tejiendo en el momento con una lana negra lo que parece ser una ruana. Me acerco y le pregunto su nombre, Carmen Brañes Mamani me responde y por muy nerviosa que está al decirle que vengo a hacerle una entrevista, se suelta y me comienza a contar que ellas realizan este trabajo por tradición. Su abuela se lo enseñó a su mamá y ella se los enseñó a ella y a su hermana Sonia, y ella espera poder hacer lo mismo con su hija. Su trabajo me parece maravilloso, distintos tipos de prenda, guantes, gorros y ruanas, que son como ponchos de distintos colores. Otra cosa que me llamó mucho la atención fue la variedad de estilos o “técnicas” que usan para trabajar.
Con respecto a esto me cuentan que ellas buscan hacer prendas novedosas e innovar en diseños para que las personas aprecien el arte de la lana de alpaca. Pero esto no es algo comercial. "Yo trabajo en otro lado y sólo participamos en esta feria para mostrar lo que hacemos, sí se puede ganar algo, bienvenido sea, pero la idea es mostrar lo que hacemos”
Sus precios van desde $2500 pesos los guantes hasta las ruanas que cuestan alrededor de $30.000 pesos.
Al avanzar por los pasillos de la feria, me encuentro con un hombre de edad, de apariencia serena que está acompañado de una mujer de edad y una joven. Don Luis Venegas, que es un artesano de plata que realiza artesanía mapuche. El es oriundo de Temuco y me cuenta que este oficio lo aprendió a los 19 años directamente de un mapuche que vivía cruzando el rio de enfrente de su casa. Esto con todo el tiempo se convirtió en su pasión y maneja una técnica muy depurada para la manufactura de estas artesanías.
Su trabajo me parece fascinante, me cuenta que trabaja en dos tipos de material, níquel y plata y que ahora se está dedicando a hacer piezas más grandes que las que cuando comenzó.
“Me inspiro en cosas que veo, yo replico artesanía que veo en fotos o libros y las fabrico y le agrego mi toque, utilizo herramientas hechas por mí".
Don Luis me dice que este trabajo es familiar, que su señora, Miriam Mutel trabaja con telas y hace mezclas de los 2 tipos de artesanía y su hija también aprendió el oficio y realiza cosas pequeñas como aros y joyas, igual que él cuando comenzó.
Sus precios están desde los 1000 hasta los 150.000 pesos.
Ya finalizando mi andar, me encuentro con un puesto lleno de instrumentos de percusión, no soy muy bueno para los nombres, pero hay bongos yembés y otras cosas que desconozco. El artesano se llama Omar Fuentes, que es de El Molle en Vicuña, al interior de La Serena. Él tiene un tema algo más profundo que los otros artesanos que tuve la oportunidad de entrevistar. Me cuenta que el trabaja en Agave que es una materia prima que existe en toda América y que es utilizada desde tiempos inmemoriales.
Me cuenta que esta materia prima lo ha llevado a recorrer todo Chile y parte de América buscando sus utilizaciones, tiene una carpeta como de investigación de distintas utilidades que se le ha dado a través de los años en las distintas culturas.
Me dice que “Al trabajar con materias primas, se rescatan los sonidos más puros”, me dice que le gusta enseñar sobre este tema y que intenta que cada persona que pase por su local pueda por lo menos intentar tocar algún instrumento para que pierdan ese miedo a realizar algo hermoso.
Él fue un poco más allá y me habló, además de su tema con esta materia prima y su arte, que este año la organización de la FIDA logró entregarles puesta donde pueden mostrar sus productos y que dignifica a los artesanos. Además de sectorizar a los comerciantes de los artesanos, debido a que no encontraba lógico estar al lado de alguien que venda quesos o hiervas.
Felicita a la organización, debido a que además este año hay mayor cantidad de artesanos de distintas partes del país, siendo la cuarta región la que más aporta en ese sentido.
Espero no haberlos aburrido contándoles lo maravillado que me encuentro con esta feria, la cual pueden visitar a este domingo, créanme no se aburrirán y quizás se van con algo espectacular a un bajo costo.