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En plena etapa de consulta ciudadana, proceso fundamental dentro del Estudio de Impacto Ambiental al que está sujeta la iniciativa, se encuentra el proyecto minero Los Pumas, a desarrollarse en la región de Arica y Parinacota.

La iniciativa -cuyo monto de inversión es de 100 MIL millones de dólares- considera para la construcción de la obra 150 trabajadores; 300 para la fase de operaciones y 100 más para el último período que corresponde al cierre. Su emplazamiento se localiza a 35 kilómetros de la localidad de Putre y a 175 kilómetros de Arica.

De acuerdo a lo señalado por Alfonso Quintana, gerente del proyecto de minera Hemisferio Sur, la iniciativa “Manganeso Los Pumas” generará una producción de 400 toneladas al año de concentrado de manganeso (Mn) para su exportación al mercado de los productores de aleaciones de Mn, en forma sustentable y en armonía con el medio ambiente y la comunidad.

“El mineral será explotado a tajo abierto, desde 3 operaciones simultáneas, y procesado en una planta de beneficio mediante operaciones de chancado, molienda y separación por medios densos”, precisó Quintana.

Para la concreción del proyecto, el ejecutivo señaló que está contemplada la construcción de un camino de acceso entre la mina y la ruta A-23, al igual que un mejoramiento de dicha vía entre la CH-11 y el acceso a la mina.

IMPACTO

Respecto de los eventuales impactos medioambientales del proyecto, principalmente referidos a la contaminación de agua, el personero apuntó que el vital elemento requerido para el proyecto será de 18 litros por segundo y será extraída en forma gravitacional, desde el área de la Quebrada de Taapaca por un acueducto de 19 km. “En el proyecto queda establecido zonas de restricción para contratistas y trabajadores del proyecto que corresponden al Parque Nacional Lauca y al río Lluta, por lo que no existirá intervención que ponga en peligro el desarrollo de la agricultura y consumo de agua de la población”, dijo.

Finalmente Alfonso Quintana señaló que el proyecto considera permanentes monitoreos de la calidad de agua superficial del río Lluta y del caudal extraído de la Quebrada Taapaca, como asimismo todas las medidas de resguardo que hacen sustentable el proyecto. “Tenemos la convicción de que este proyecto es coherente con los objetivos estratégicos del desarrollo regional y con los planes de desarrollo de las comunas donde se inserta”, concluyó.