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"El que no conoce al Loco Vadulli, no conoce Arica", dicen por ahí. Hace un par de semanas se hizo viral una fotografía [9] donde veíamos a nuestro personaje emblemático con pareja; sí, con pareja y, aunque a muchos les costó creerlo, en esa imagen aparecía de la mano con una mujer, gaia.

Como buena asistente social que soy, me dediqué a investigar ¿por qué tanta expectación por una simple imagen? Donde iba se hablaba del supuesto romance del Loco Vadulli. Por varios días fue motivo de burla para los hombres solteros. Por ejemplo, le decían al cuarentón soltero de la oficina "¿qué te esta pasando, si hasta el Vadulli tiene novia?". Muchos se lo tomaron con bastante humor, otros pocos se molestaron. Hasta salió el clásico "Vadulli tiene novia y la U sigue sin estadio".

Al día siguiente del "golpe periodístico" en redes sociales, me dediqué a recorrer las calles céntricas de la ciudad de Arica para dar con el paradero de mi loquito lindo. Me extrañó no encontrarlo con su vinito en una banca en pleno paseo 21 de mayo, ni conversando con sus amigos limpiadores de autos al mediodía entre las calles 18 de Septiembre y Manuel Montt, ni pidiendo el baño en las dependencias de la alcaldía o fuera del Teatro Municipal.

No lo encontré, pero como soy mina, regresé al día siguiente, no me podía quedar con la copucha. Realicé el mismo recorrido y tampoco logré dar con su paradero. Conversé con amigos de él y me comentaron que había ingresado de urgencia a la posta la noche anterior, porque se encontraba muy mal producto de un principio de cirrosis. También me comentaron que desde esa noche no lo habían visto así que era muy probable que lo hayan dejado hospitalizado o se haya quedado durmiendo en los alrededores del hospital regional de Arica.

Indagando más, les consulté a sus amigos de la calle sobre la foto tan famosa y, entre risas, me comentaron que era vieja, de hace un par de meses atrás, que había sido algo casual y rápido, algo así como un touch and go, para no decir que fue la volá del momento o producto de los efectos del alcohol. Ésa es la verdadera historia tras la foto de Ricardo Dodds Laspiur, alías el Loco Vadulli.

Quienes no viven en Arica, comprenderán que el clima genera en los residentes más calor de lo normal, lo que genera que nuestro cuerpo perciba emociones, sensaciones y percepciones más intensas, con lo que que no quiero decir que los ariqueños somos calientes.

Retomando el tema, y ahora sí que me pongo seria, ¿qué pasa con nosotros que nos divierte tanto el Loco Vadulli, sus hazañas y sus locuras? Es muy probable que el día en que nuestro Loco Vadulli muera, cientos seremos los que lo iremos a despedir, porque así somos los chilenos, de cartón. ¿Por qué disfrutamos inventándole amores fugaces y ficticios, en vez de velar por sus derechos más básicos?

¿Será que lo vemos como la mascota del sector centro de la ciudad? Come en la calle, duerme en la calle, qué más da... pero de inclusión, no tenemos nada. Y me incluyo, porque yo soy tan de cartón como muchos de los que decimos estimarlo, pero a la hora de los quiubos, nos olvidamos: porque es loco, porque está deaseado, porque es alcohólico, porque está en situación de calle y sigue la interminable lista para justificar lo injustificable y no darle una mano de verdad.

Queda el hecho para reflexionar. Espero que después, el día que parta de este mundo, su masiva despedida sea más por cariño que por sentimientos de culpabilidad.

Ver también:

+ ¿Qué hace a Arica una ciudad donde el turista no quiera quedarse y prefiera pasar de largo? [10]

+ Arica, un psiquiátrico al aire libre [11]