Buenas conversaciones, buenos futuros
¿Cambios para que Todo siga Igual?
03 Mayo 2007
Las promesas nos vienen como en los comerciales, envueltos en bonitos papeles de colores: Modificación de la Norma 409/I, en Julio de 2006, no incluye boro.
Veronica Grunewald >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano
Hace ya un mes que visitó Arica la Presidenta Michelle Bachelet en el marco de la promulgación de la Ley que creó la nueva región Arica Parinacota. En la esperada visita, la mandataria anunció la inversión de 42 mil millones de pesos (US$78 millones aprox.) en la construcción de una planta desalinizadora de agua de mar a fin de dotar de agua potable de calidad a los habitantes y proteger, de paso, los escasos y disminuidos recursos hídricos de la nueva región.
Si bien un mes es un período muy corto como para preguntarnos cual es el estado de los anuncios presidenciales, es necesario recordar las promesas que nos hicieron y, como niños pequeños, apurar los pasos relevantes que deben darse para la consecución de las obras.
La planta desalinizadora de Antofagasta con una inversión de US$52,5 millones entró en operaciones en marzo del 2003, luego de tres años transcurridos desde el inicio del proceso de licitación. Por ahora, la planta en Arica, no figura entre las licitaciones del MOP año 2007. En la página web del Ministerio de Obras Públicas solamente hay dos licitaciones para Arica: - Construcción de Obras de control de crecidas de cuenca Río San José, por 150 millones de pesos y – Estudio en modelo matemático y físico de la desembocadura del Río San José, por 110 millones de pesos. Suponiendo que el llamado a licitación se programe para el 2008, tendríamos planta desalinizadora para el 2011. Mejor tiempo, sin lugar a dudas, que la anunciada construcción del nuevo hospital y el dilatado inicio de las obras. El marcado optimismo está basado en la mala memoria, en la necesidad de creer que alguna vez en Arica no nos tomarán el pelo.
Sin embargo, esto no quiere decir que dejemos de lado la batalla para conseguir la modificación de la norma que regula la calidad del agua potable (Nch 409/2005). Y las razones van más allá de merecer los ariqueños agua apta para consumo humano, sino por que está modificada por el MINSAL en Julio del año 2006, reemplazando a la 409/I y, aunque incorpora elementos radioactivos y pesticidas y reduce la permisividad para el arsénico, el hecho de no incluir el boro sabiendo el Ministerio que era tema en discusión tanto en la ciudad como en la Cámara de Diputados (Sesión 30º del 14.12.2004, la Diputada Rosa González expone la situación destacando que ya en 1997 la Cámara había tomado conocimiento del tema) la transforman en una norma ineficiente, mezquina y pobre.
Luego de la sesión de diciembre de 2004 se resolvieron estudios respecto de los efectos del boro en la salud humana, latamente anunciados en mayo del 2005 por el ministro de salud del período, don Pedro García. La última palabra al respecto no está dicha, ya que los mencionados estudios comenzaron recién este año. La modificación de la norma que regula la calidad del agua potable no considera las necesidades de los ciudadanos ariqueños, es una norma incompleta, aprobada con apuro. El Ministerio debió esperar resultados de los estudios por ellos encargados, para incorporar el boro a la norma 409/I, que de paso, había sido aprobada el año 1984. ¿Otra modificación debe esperar otros 20 años?
El mismo jefe del departamento de salud ambiental, Julio Monreal, dio a conocer que se incorporaron plaguicidas en esta modificación, que NO SE UTILIZAN en la agricultura chilena “pero debían estar prohibidos”. ¿Por qué no actúan de igual manera respecto del boro y lo incluyen “porque la OMS” lo tiene delimitado?
Verdaderamente, me resisto a pensar en la negligencia de las autoridades, en el desorden y en el abuso de la fe de toda una ciudad.
Si bien un mes es un período muy corto como para preguntarnos cual es el estado de los anuncios presidenciales, es necesario recordar las promesas que nos hicieron y, como niños pequeños, apurar los pasos relevantes que deben darse para la consecución de las obras.
La planta desalinizadora de Antofagasta con una inversión de US$52,5 millones entró en operaciones en marzo del 2003, luego de tres años transcurridos desde el inicio del proceso de licitación. Por ahora, la planta en Arica, no figura entre las licitaciones del MOP año 2007. En la página web del Ministerio de Obras Públicas solamente hay dos licitaciones para Arica: - Construcción de Obras de control de crecidas de cuenca Río San José, por 150 millones de pesos y – Estudio en modelo matemático y físico de la desembocadura del Río San José, por 110 millones de pesos. Suponiendo que el llamado a licitación se programe para el 2008, tendríamos planta desalinizadora para el 2011. Mejor tiempo, sin lugar a dudas, que la anunciada construcción del nuevo hospital y el dilatado inicio de las obras. El marcado optimismo está basado en la mala memoria, en la necesidad de creer que alguna vez en Arica no nos tomarán el pelo.
Sin embargo, esto no quiere decir que dejemos de lado la batalla para conseguir la modificación de la norma que regula la calidad del agua potable (Nch 409/2005). Y las razones van más allá de merecer los ariqueños agua apta para consumo humano, sino por que está modificada por el MINSAL en Julio del año 2006, reemplazando a la 409/I y, aunque incorpora elementos radioactivos y pesticidas y reduce la permisividad para el arsénico, el hecho de no incluir el boro sabiendo el Ministerio que era tema en discusión tanto en la ciudad como en la Cámara de Diputados (Sesión 30º del 14.12.2004, la Diputada Rosa González expone la situación destacando que ya en 1997 la Cámara había tomado conocimiento del tema) la transforman en una norma ineficiente, mezquina y pobre.
Luego de la sesión de diciembre de 2004 se resolvieron estudios respecto de los efectos del boro en la salud humana, latamente anunciados en mayo del 2005 por el ministro de salud del período, don Pedro García. La última palabra al respecto no está dicha, ya que los mencionados estudios comenzaron recién este año. La modificación de la norma que regula la calidad del agua potable no considera las necesidades de los ciudadanos ariqueños, es una norma incompleta, aprobada con apuro. El Ministerio debió esperar resultados de los estudios por ellos encargados, para incorporar el boro a la norma 409/I, que de paso, había sido aprobada el año 1984. ¿Otra modificación debe esperar otros 20 años?
El mismo jefe del departamento de salud ambiental, Julio Monreal, dio a conocer que se incorporaron plaguicidas en esta modificación, que NO SE UTILIZAN en la agricultura chilena “pero debían estar prohibidos”. ¿Por qué no actúan de igual manera respecto del boro y lo incluyen “porque la OMS” lo tiene delimitado?
Verdaderamente, me resisto a pensar en la negligencia de las autoridades, en el desorden y en el abuso de la fe de toda una ciudad.
FUENTES:
http://www.hannachile.com/noticias/153/cambios-norma-agua-potable.htm
Foto
Jueves 03 de Mayo de 2007
Comentarios
La actualización de la NCh
La actualización de la NCh 409(ahora 2005), fue publicada el 26 de marzo recién pasado en el diario oficial. Si bien mejora algunos parámetros, no consideró:boro, bario, aluminio y nickel; todos con valores recomendados por la OMS entre 0,02 a 0,7mg/lt.
Agradeceria muy
Agradeceria muy especialmente si nos pueden hacer llegar los textos de las normas 409/84 y 409/2005 a fin de comparar las modificaciones acontecidas y sacar conclusiones respecto a quienes se benefician.
Notaremos que la norma actualizada (409/2005) incrementa los limites maximos permitidos de Residuos Solidos Filtrables, Cloruros, Sulfatos y Nitratos, respecto a las vigentes desde 1984.
¿Que proceso industrial incremento la concentracion de estos elementos en las aguas potables de las ciudades del norte de Chile en los ultimos años?
¿Este proceso industrial es eficiente para "abatir" el boro, elemento que además está presente en alta concentración, no solo en el Lluta sino en el océano?
"Lo importante es no dejar de hacerse preguntas"
(Einstein)
Mi queridísima Amiga
Mi queridísima Amiga Verónica, luchadora incansable desde la distancia, nos mantienes el foco en lo importante que son los plazos y la palabra empeñada mis agradecimientos por ello.
Por otra parte rescato tu última afirmación
?-Verdaderamente, me resisto a pensar en la negligencia de las autoridades, en el desorden y en el abuso de la fe de toda una ciudad.?-
Solo basta darle una vueltecita a la prensa nacional y encontraremos la respuesta.
¿Verito, No has pensado en liderar un movimiento de desobediencia civil, por las promesas incumplidas?
Solo dime donde firmo.
Quedarnos quieto y observar
Quedarnos quieto y observar como el tiempo pasa poco nos ayuda. Por eso me gusta este seguimiento a cada acción que se compromete. Por ahora a seguir activos y a sacar a nuestra nueva región adelante.
Me resisto a perder la fe en
Me resisto a perder la fe en que las autoridades por fin se preocuparán de los problemas reales de la gente, aunque a veces ante las evidencias esa fe deberia no existir, pues pienso que no estan ni ahi con temas fundamentales.
Este medio digital de forma seria, imparcial y ciudadana ha iniciado esta campaña, para que se modifique la norma y que debería importarle en mayor medida a la autoridad, pero ya ven para muestra un boton y seguimos haciendo las cosas con el famoso tincómetro.
Dios nos ayude
Totalmente de acuerdo
Totalmente de acuerdo Veronica. Esta semana entregaremos -como diario- una carta en el Ministerio de Salud en Santiago, para que nos expliquen las modificaciones que tuvo la Norma 409/I y cuales son las razones de no incorporar el Boro en dicha normativa.
saludos