Coronavirus: El presidente Piñera debe salir del estado de retardo

El 11 de marzo del presente el Director General de la Organización Mundial de la Salud, OMS, Tedros Ghebreyesus, expresó enfático:”Hemos estado pidiendo cada día a los gobiernos que tomen medidas urgentes y agresivas(…) No podemos decirlo más alto, más claro o con más frecuencia: todos los países están a tiempo de cambiar el curso de esta pandemia”.

Las organizaciones ciudadanas de la sociedad civil hemos manifestado nuestra voluntad de actuar unidos y responsablemente frente a esta crisis donde la salud de la población es lo primero y en donde la vida humana está en peligro.

En efecto Chile, lidera las cifras de contagios en el continente. Sin embargo, el Gobierno, ha persistido en un estado de reacciones retardadas que son preocupantes.  En el día de hoy ha declarado el Estado de Catástrofe, esta medida se toma en Fase 4, recogiendo la experiencia de Italia y España, esta medida debió haberse tomado en Fase 2 o 3, con el objeto de haber tenido disponible recursos de emergencia, para ser destinados a fortalecer el sistema de salud público, por ejemplo para adquirir más equipos de respiración mecánica para ser destinados a regiones. La región de Arica y Parinacota, solo cuenta con 12 camas con respiradores mecánicos. Hoy sin embargo, pese a tener esos recursos, ya no existe stock disponible de esos equipos.

El Colegio Médico de Chile y la Federación de Facultades Médicas envió la semana pasado un conjunto de propuestas para que el Gobierno tomara medidas drásticas, entre ellas el cierre de las fronteras, el Presidente anunció el domingo pasado que cerraría las fronteras, pero recién este miércoles 18 de marzo se está procediendo al cierre de fronteras, después que Perú anunciará el cierre de las fronteras con Chile el lunes pasado.

De la misma forma el Colegio Médico propuso al Presidente a que convocara a un Consejo Nacional de Respuesta Integral a la pandemia del COVID-19, formado por Sociedades Científicas y Médicas, por los Ministerios de Salud, Educación, Ciencias, Hacienda y Economía; representantes de la Academia; y representantes de amplia validación social por parte de la Ciudadanía, lo que hasta la confección de este artículo, aún no tenía respuesta.

En la actualidad estamos en la fase 4 de la pandemia y el Gobierno debería de manera urgente:

• Declarar cuarentena nacional con el objeto de contener el contagio masivo de la población, para evitar que el sistema de salud colapse. Y que la población permanezca en sus hogares. La OMS, ha vuelto ha solicitar en el día de hoy a todos los gobiernos del Mundo, que se establezca cuarentena en todos los países del planeta.
• Cierre del funcionamiento de todos los bares, restaurantes, pubs, mal y lugares de concentración de público.
• Exámenes gratis para determinar la existencia del coronavirus para toda la población. El primer anuncio que hizo el Ministro Mañalich sobre la pandemia fue una burla y ofensa para la población, al expresar que se cobraría por el examen el valor de $20.000.
• Medidas económicas que vayan en beneficio de la población como lo han realizado otros países (Prórroga del pago de las hipotecas a 18 meses (Italia); Subsidio a los trabajadores de pequeños comercios: restaurantes, trabajadores, bares, y pubs (Austria); y otras que han recomendado diversos economistas, congresistas y personeros de la sociedad civil.
• Asumir la propuesta del Colegio Médico de crear el Consejo Nacional de Respuesta Integral a la Pandemia del COVID-19, para que la crisis esté monitoreada por organismos expertos.
• Campaña de comunicación estratégica para orientar a la población a permanecer en sus casas y a cómo actuar rente a la pandemia.

Han pasado cinco meses desde el estallido social del 18 de octubre, en todo este tiempo el Gobierno y los poderes del Estado, no dieron ninguna solución estructural a las demandas ciudadanas, excepto acentuar medidas represivas.

Los Movimientos Ciudadanos mantienen intactos sus sueños de cambio y transformaciones, y han priorizado la Unidad para enfrentar la crisis sanitaria que atraviesa el planeta y nuestro país. Sin embargo, el Gobierno no puede permanecer impasible frente a las medidas urgentes para enfrentar la crisis y evitar el colapso del sistema de salud. La vida de las chilenas y chilenos es la que está en juego.