Dada las encuestas, debates y las elecciones me pregunto ¿Existe el fascismo en Chile?

16 Noviembre 2021
El fascismo toma prestados ciertos conceptos de otras teorías o filosofías políticas y los amalgama dando como resultado una doctrina fácil de percibir pero difícil de definir.
Enzo Varens >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

Ante el auge que ha experimentado la candidatura de José Antonio Kast y su Partido Republicano, han surgido diversos apelativos para su programa político y su ideologíaEntre ellos, el fascismo. Pero, ¿son Kast y su Partido Republicano fascistas?

En estas líneas buscaremos la respuesta.

El fascismo, como ideología política, no es una teoría filosófico-política pura. El fascismo toma prestados ciertos conceptos de otras teorías o filosofías políticas y los amalgama dando como resultado una doctrina fácil de percibir pero difícil de definir.

En primer lugar usa las teorías de Locke sobre la propiedad, que precede al contrato social, y las teorías de Nozick sobre la inviolabilidad de ella para tomar al libertarismo como su doctrina económica. El libertarismo ya de por sí es extremo (para ellos los impuestos son, literal, un robo). Pero los fascistas no son propiamente libertarios.

Si bien simpatizan con el libre mercado, reniegan de las consecuencias del libertarismo a escala valórica, pues el libertarismo está a favor del matrimonio homosexual, la adopción homoparental, el aborto libre, entre otras. Para evitar adoptar estas consecuencias valóricas del libertarismo, el fascista toma prestado a Nietzsche y usa la idea del superhombre como justificación para aseverar la supremacía de su grupo particular, bajo criterios de raza, origen social, nacionalidad, orientación sexual, etc. 

Unidas, las ideas del libertarismo y del superhombre generan un cóctel explosivo cuya idea central es la supervivencia del más fuerte, generando binomios de fuerte versus débil (ej: hombre v/s mujer, chileno v/s extranjero, rico v/s pobre). Esta raíz filosófica genera la similitud de comportamientos entre el fascismo y las sectas religiosas, como la creencia del pueblo elegido, las teorías de conspiración, el combate al “infiel”, la prédica, y sobre todo, la rigidez de pensamiento.

El elemento de prédica es lo que deriva en que los fascistas participan del juego democrático: si bien el fascista es autoritario, no lo es en su origen. La democracia es un medio para alcanzar el poder, y así lo demuestran las historias de Trump y los nazis.

En resumen: Kast y el Partido Republicano son fascistas, tanto por su comportamiento, como por su programa de gobierno. Este hilo se basó en Eco y Kershaw, y mis conocimientos como diplomado en filosofía política en Harvard. Columna originalmente expuesta como hilo en mi cuenta personal de Twitter

Bibliografía recomendada:

Al infierno y de regreso: Europa 1914-1949 (La historia de los pingüinos en Europa) - Ian Kershaw 

Ur Facism - Humberto Eco

Imagen: Flicker