¿Qué dicen los candidatos en la primera franja política? Análisis más allá del discurso [VIDEO]

25 Octubre 2021
El pasado 22 de octubre se dio comienzo a la propaganda electoral, desde donde los candidatos, utilizando herramientas comunicacionales tratarán de convencer a los electores por qué deben votar por ellos y no por otro.
Veronica Grunewald >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

En este primer análisis revisaré el contenido de  la primera franja, iniciada el día 22 con el candidato  profesor Eduardo Artés y sus sencillas imágenes en el contexto del lanzamiento de su campaña en la popular comuna de San Joaquín, donde su discurso de A refundar Chile tiene eco en una veintena de personas que representan principalmente a jóvenes que agitan banderas rojas y blancas junto a  algunas del MIR (reconocida organización de extrema izquierda, fundada por el padre del candidato Marco Enríquez-Ominami, quien al contrario, no utiliza a su histórico padre en su propaganda ni en su discurso).

Las banderas del MIR van sobre la cabeza del candidato Artes, mientras de  fondo se oye parte del histórico discurso de Salvador Allende evidenciando la profunda admiración que éste posee por el período político del “compañero presidente”. Es el número cinco en la papeleta, lo que nos queda claro luego de ver las manos abiertas, mostrando los cinco dedos con las letras formando el  apellido del candidato. No hay novedades. También usa la estrella cerca de su nombre en banderines azules,  como veremos en Sichel y Parisi. Se lo dejamos pasar. 

Puede ser que le afecte su reducido presupuesto y solo le alcance para una  breve y escolar animación del candidato Boric. También es el único contrincante mencionado por Susana Labrin que apoya a Artés. Mala práctica, pues es su franja ¿Porqué mencionar a otro candidato?

Y un entorno tradicional, con el candidato José Antonio Kast, sentado en un cómodo lugar de su casa, con fotos de su numerosa familia justo atrás a su derecha, diciéndonos éste soy yo, y mis circunstancias. Soy un candidato estable, me respalda la solidez de una familia y mis lecturas. Es decir, soy el candidato que sabe. Luego la invitación a  atreverse. Lo cual es un desafío. A todos nos gustan los desafíos y puesto de esa manera, es un discurso que podría servir si no fuera por la incoherencia entre las palabras y los gestos. El resultado es un mensaje confuso, que invisibiliza a “una gran mujer” de la que toma una frase sobre seguir a la masa, pero no la individualiza.  A mi parecer Kast tomó parte del discurso de Piñera y el mítico “delincuentes se les acabó la fiesta” , lo juntó con el juramento a la bandera y armó su franja nacionalista donde las banderas chilenas, incluida una hecha jirones, se mecen al compás de  una pegajosa melodía que repite “Libertad”.

¿Cuánto habrá pagado el candidato por este mensaje? 

Boric abre con una estructura con su nombre. Eso nos dice que el sostiene su fortaleza  en su nombre, en él mismo.  Es el primero en posicionarse en el territorio y su geografía. “El norte y el sur son diferentes, pero en sus sueños se encuentran”. El primero en mencionar a los pueblos originarios y a los afrodescendientes. Su discurso va en armonía con las imágenes. Sigue  con la imagen de un enorme árbol con una gran raíz, fuerte y rotundo.

El candidato también es el primero en mencionar a los niños como prioridad en su eventual gobierno  y la importancia de la salud mental.  No estás solo, concluye. El acierto en la franja de este candidato es que, sin  aportar con datos duros, convoca  a una gran mayoría,  Incluyendo a los pueblos originarios y afrodescendientes y a las familias de más de tres millones de chilenos que han padecido problemas de salud mental en los últimos  doce meses. Los famosos que lo apoyan tal vez están demás, se ve como un anexo a la presentación previa. 

Por su parte, la franja de la candidatura de Sichel repite, como Boric,  la diversidad de la geografía de Chile, por una parte y el deseo de libertad y el desafío  de mirar a los ojos que menciona Kast. También llama a defender la libertad,  pero apunta a la libertad económica, libertad para llegar hasta donde cada uno sea capaz. Creo que es un  mensaje tan neoliberal que da pudor mencionarlo.   Lo más increíble es la sección donde sus zapatos son los protagonistas. En diversos escenarios, los zapatos se autoproclaman como capaces de ponerse en el lugar de otro, lo que nos parece incongruente al recordar que tres  veces le repitió a la candidata Yasna Provoste, en uno de los debates recientes, que él era abogado, por lo tanto, su escenario natural era el mundo de los estudios jurídicos y similares. En ningún momento previo el candidato se había reconocido como caminante, conocedor del mundo campesino o algo similar. ¿Hasta dónde es posible mutar tanto? ¿Con cuántas máscaras más contará este camaleónico candidato?

La franja del candidato Marco Enríquez-Ominami es sin duda, cinematográfica. Buena luz y fotografía. El conoce de estos detalles, de slogan de impacto. El conoce bien la realidad del país y de Latinoamérica, como asesor de presidentes y fundador del Grupo de Puebla. La pregunta es cómo ha permitido que las cosas lleguen a este punto con tantos años en un lugar desde donde pudo haber hecho más.

Tan cinematográfica como la de ME-O es la franja de la candidata Yasna Provoste, claro que no era apta para no videntes ya que solo era posible escuchar a alguien cantando el himno  nacional mientras en las imágenes se mostraban datos y frases sobre la pandemia. Cifras sobre los fallecidos y la desigualdad estructural del sistema de salud chileno. Me pareció una imagen apropiada para un corto de  cine, pero no para una franja política. Ojalá no le haya salido muy caro. Cada minuto cuenta y si tiene algo que decir, dígalo, no lo deje a la imaginación.

¿Y usted?  Los invito a revisar con lupa a los protagonistas de la franja presidencial. Todo tiene una lectura incluso el silencio.