Adiós Juani, el cielo te espera con banda de bronces

13 Abril 2020

Joven bailarín de morenada falleció en trágico accidente.

Ada Angélica Rivas >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

Nació en Mollendo, Perú, y poco a poco fue bajando de piso ecológico hasta cruzar la frontera y llegar a Arica, a trabajar y compartir con quienes lo acogieron como un hermano, en la Morenada San Pedro De Totora, Bloque Real Pachacama, que cada año se destaca en el Carnaval con la Fuerza del Sol.

Juani Copaja, era un joven peruano, querido por muchos, los que fue conquistando en el camino que recorrió, mientras vivió al otro lado de la frontera de su tierra natal junto a una de sus hermanas menores.

Humilde, buen ser humano, respetuoso y alegre, son algunas de las cualidades de quién tuvo un final trágico el sábado 11 de abril en la noche, en la salida sur de la ciudad de Arica, donde hubo un choque brutal que acabó con su vida.

Las sirenas de ambulancias y bomberos se articularon de tal forma que alteraron la tranquilidad de quiénes aún trabajábamos cerca de las 22 horas, como tantas veces sin vincular el temor de algo trágico con nuestros afectos, aunque en el fondo siempre existe el miedo a que nuestra fragilidad se rompa en mil pedazos.

En Facebook lo primero que aparece es el mensaje de Yury Martínez, un fraterno de la morenada, que alude al fallecimiento de Juani, de ahí sigue una cadena interminable de conversaciones sobre lo que no quisiéramos constatar como real. Las noticias indican el choque de dos vehículos y un fallecido joven sin identificar. Y la verdad nos golpea la cara. Era él, nuestro estimado Juani, el mayor de tres hermanas, que nos compartía recetas para cocinar en semana santa y que preocupado por la pandemia mundial, nos enviaba noticias e informaciones.

Desde Bolivia, sus amigas escribieron en sus muros de Facebook, incrédulas y dolidas por la partida de quien les brindó hospitalidad a los pies del Morro de Arica, en época de carnaval.

Porque él era alegre, cortés y empático, cualidades que lo hicieron merecedor del recuerdo de su promoción 2002 del Colegio Técnico Comercial, de Desaguadero, en la frontera con Bolivia, donde su compañera Vicky Mamani, con quien hacía grupo en los trabajos de exposición, dice que lo que sobran son virtudes.

Porque Juani fue “un compañero, amigo, confidente, una persona humilde y sabia a la vez, siempre actuaba con prudencia y honestidad, no compartía de ninguna manera la maldad hacia los demás, seguro de sí mismo, un hombre de fe, generoso y buen hermano”. Razones de sobra que nos da Vicky para ganarse el respeto de quienes lo conocieron.

La pandemia mundial tiene cerradas las fronteras, y en este caso, aún no se sabe si su cuerpo podrá ser trasladado a su tierra… porque su alma quedó entre los que lo conocimos, y en el más allá, donde será esperado con la banda de bronce que se merece en este triste final.