Alimentación, consumismo y coronavirus

29 Octubre 2020

No sé si supieron pero en Europa quedó la escoba otra vez con el COVID. Estaban todos haciendo su vida normal tomando chelita en los restaurantes y ¡paf!, ¡rebrote! la escoba po'.

Alexa Gallardo >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

Más allá de los hábitos y medidas (unas totalmente injustificadas si estas en Chile) que hemos adoptado para disminuir los riesgos de contagio en todo el mundo, si esta pandemia no es infinita, lo será la siguiente. Porque habrá una siguiente po'. Y todo tiene que ver con cómo estamos utilizando la naturaleza para fines de consumo. Y en este caso específicamente, el consumo de animales. 

Del 100% de animales que habitan este mismo planeta; 36% son humanas, humanos y humanes, 4% animales salvajes (desde ratones hasta ballenas, cacha) y 60% ANIMALES DE GRANJA, osea, los que se comen o sus subproductos.

Sí, hay más animales de producción alimentaria que personas que los consuman y no por existir más vacas existe más tierra en el planeta y por ese contacto excesivo -antinatural- es que estos virus raros logran saltar entre especies, como esa vez que pasó de los chanchos a los seres más brillantes del planeta, nosotres. 

Ahora, el problema principal es el consumismo alimentario. Y el problema del consumismo alimentario y su impacto en el planeta no se limita sólo a la producción industrial de animales si no que a la producción industrial de alimentos en general. Los principales monocultivos que han deforestado las selvas en el mundo son de palma y soya (principales ingredientes en los productos ultraprocesados veganos y la soya además como alimento para el ganado). Si de vender se trata, la ética caerá siempre en el consumidor ya que el empresario puede vender sus productos con la bandera que sea.

La única forma de aportar desde lo personal es reducir tu consumo para que las empresas pierdan mercado, desarrolla tu ética de consumo. Quizás ya estás haciéndolo bien, ya no gastas en tonteras y cachaste que tu iphone nuevo es igual al anterior. Pero, ¿y la comida?, de repente mientras luchas por un Chile más justo para los menos privilegiados estás pagándole los privilegios al enemigo, y ¡no po'! Date cuenta y deja de comprar Coca Cola, tu cuerpo lo agradecerá.

LA COMIDA VEGANA NO ES EXCLUSIVA PARA VEGANOS

Los veganos son quienes no consumen alimentos de origen animal. El resto, son omnívoros, es decir, comen de todo; animal y vegetal (enseñanza básica). Esto significa que aunque decidas comer animales por opción personal, no pasa nada si comes sin ellos. Puedes consumir menos carnes y lácteos en el día a día y eso no te hará andar criticando moralmente de forma innecesaria al resto, eso es otro nivel de veganismo, tranquilo. Así que si comes productos animales, baja tu consumo. Los porotos granados siempre han sido veganos. 

Y si eres vegano, no comas hamburguesas de soya PF (son los mismos PF que hacen hamburguesas con vacas…) a menos que seas vegano por razones diferentes a que te importen los animales o el planeta. Y mucho ojo con los productos que reemplazan los habituales cárnicos o lácteos, el aceite de palma utilizado en las cremas y mantecas vegetales es el responsable de que muchas especies de animales salvajes estén en riesgo de extinción por la pérdida de su habitat, el problema no se soluciona exclusivamente convirtiéndose al veganismo, después de todo puedes seguir siendo vegano comiendo Papas Lays y tomando Coca Cola.

PREFIERE LOCAL

Cada vez que comes papas fritas de las pre fritas, fíjate en la etiqueta. Las marcas más económicas vienen, muchas veces, desde otro continente incluso. 

Prefiere comprar tus alimentos, ya sean materias primas o elaborados en el comercio local, el almacén, el mercado, agro o feria donde generalmente los productos son de agricultores o productores locales, la plata se queda en la región y tu alimento será más fresco y nutritivo, puras buenas.

Y como todo en la naturaleza, si el entorno prospera las especies que lo habitan también y viceversa.