El Feminismo como una práctica emancipadora hacia la igualdad

13 Marzo 2020

Este 8 de Marzo se conmemoró el Día Internacional por los Derechos de las Mujeres y la agenda feminista en todos los países convocaron a un paro de mujeres llamado UnDíaSinNosotras o UnDíaSinMujeres.

Marcela V. Rodríguez >
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La convocatoria por parte de Organizaciones feministas de diferentes países entre los cuales destacan México, Argentina y España fue a un paro el día 9 de marzo (debido a que el 8 era domingo), con el fin de visibilizar la importancia de los aportes de las mujeres en el mundo, haciendo notar su ausencia con un #UnDíaSinMujeres.

El eslogan consistía en “Ni una mujer en las calles, ni una mujer en los trabajos, ni una niña en las escuelas, ni una joven en las universidades, ni una mujer comprando”.  Las mujeres de todo el mundo estaban llamadas a salir a las calles, a movilizarse. Porque si ellas paran, el mundo también lo hace.

En este día, como cada año muchas localidades de Chile se unieron a la huelga feminista para reivindicar los derechos de las mujeres; a la lucha contra la precarización de la vida.

En este día se volvió a hacer historia. Fueron millones de mujeres en las calles. La huelga la levantaron entre todas con diversas marchas y manifestaciones. Las mujeres salieron a las calles y la tiñeron de color morado y color verde, y gritaron por otra vida.

"AHORA QUE ESTAMOS JUNTES

AHORA QUE SI NOS VEN

ABAJO EL PATRIARCADO QUE VA A CAER

QUE VA A CAER

ARRIBA EL FEMINISMO

QUE VA A VENCER

                        QUE VA A VENCER"                      

Feminismo, que nos invita a situarnos en el mundo e identificar la posición de subordinación que sufrimos las mujeres en relación a los hombres sobre la base de la categoría de análisis del concepto de Género (como un conjunto de creencias, rasgos personales, actitudes, sentimientos, valores, conductas y actividades que diferencian a hombres y mujeres a través de un proceso de construcción social que tiene varias características y que supone la jerarquización de estos rasgos y actitudes) y sobre el análisis de conceptos claves para entender la teoría feminista como lo son el modelo androcéntrico y patriarcal que respectivamente define a lo masculino como representación de la humano y de dominación que determina la opresión y la subordinación de las mujeres.

El feminismo nos invita a ser conscientes del valor histórico que tenemos y hacer uso de las “gafas violetas” e interpretar el mundo bajo un prisma distinto: con perspectiva de género.

Desde aquí comprendes más profundamente tanto la vida de las mujeres como la de los hombres y las relaciones que se dan entre ambos. Entonces lo que antes parecía “normal”, ahora resulta inaceptable y en menor o mayor medida machista.

Pues te empiezas a encontrar en cada esquina (y no desde un sentido paranoico) con actitudes sexistas que colocan a las mujeres en un lugar inferior, de desigualdad y de violencia desde los espacios más íntimos como la familia (en las labores domésticas, el cuidado infantil y la corresponsabilidad o la violencia intrafamiliar) hasta llegar a los espacios público (el acoso callejero, la brecha salarial, el aumento de empleo en situación de precariedad y la feminización de la pobreza, el acceso a la política, a los cargos directivos o a la educación con sesgos).

Feminismo, movimiento que no solo beneficia a las mujeres, sino que también a los hombres, porque los invita a que utilicen las luchas feministas y sus discursos como herramientas de ruptura del discurso hegemónico y como herramienta de transformación en los modos habituales de ser y de sentirse hombres en nuestras sociedades.  

Porque, ciertamente que los liberara de la presión de mantener su masculinidad hegemónica característico en el sistema patriarcal donde un hombre debe tener fortaleza de carácter y física, ser los proveedores, quienes toman decisiones, seguridad de su masculinidad demostrándola mediante actos violentos, rudos y agresivos, tener una vida sexual activa y con mujeres.

Los invita a un proceso de reflexión y de reconocimiento de que el patriarcado, como origen de una sociedad marcada por las injusticias y las desigualdades, sitúa a los hombres en una situación de ventaja por el hecho de serlo y los invita a estar dispuestos a perder privilegios para ganar en igualdad, desde el convencimiento de que con el cambio ganamos sin distinción de género.

La película “No soy un hombre fácil” dirigida por Eleonore Pourrait, actriz, escritora y directora y orgullosamente feminista, nos muestra a un hombre con actitudes abiertamente machistas pero que después de un golpe en la cabeza se despierta en un universo paralelo donde las mujeres son el género dominante y los hombres sufren las mismas aprensiones que las mujeres sufren en nuestro mundo. Una película recomendada para reflexionar precisamente sobre la desigualdad de género.

Feminismo, un movimiento que también beneficia sin distinción de edad, porque por un lado le da voces a los silenciados que son esas niñas y esos niños que sufren la violencia de género.

Es el caso de Javiera de 6 años que, aunque había una separación definitiva por parte de Claudia su madre y su padre Alfredo, denuncia por VIF y decreto de medida cautelar de acercamiento no existió pronunciamiento por el régimen de visita.

Fue así que el 19 de octubre de 2005, durante el uso del régimen de visita y luego de una situación de violencia hacia Claudia, tomo y lanzo a la pequeña Javiera por la ventana de un séptimo piso. Pese a que existe ya una condena, el asesinato de Javiera es la razón que impulsó la creación de la Coordinadora 19 de diciembre y que tiene como su principal propuesta que esta fecha sea declarada como el Día Nacional Contra el Femicidio en Chile

 

Un feminismo sin distinción de edad, porque por otro lado favorece construir una sociedad justa e igualitaria donde niñas y niños se eduquen en la diversidad, para que vean que hay muchas maneras de ser una niña o un niño más allá́ de lo convencional y de las reglas heteronormativas donde las niñas deberán ser sumisas, tranquilas, obedientes, con colores rosas, muñecas, cocinitas y princesas y los niños no lloran ni son sensibles al contrario deberán ser fuertes y valientes como un pirata o un superhéroes. 

Modelos estereotipados reproductores de una sociedad machista que perpetua roles sobre cómo niñas y niños tienen que comportarse, expresarse y relacionarse y encasilla bajo lo que es femenino o es masculino revestido al tiempo de formas de discriminación y violencias basada en género.

Los feminismos, entendiendo que cada feminismo responde a unas exigencias históricas, políticas y sociales del momento, son prácticas emancipadoras porque plantea nuevas líneas de actuación para las mujeres y los hombres porque nos invita a luchar y a luchar por uno de los componentes del horizonte hacia el que nos debemos dirigir para la construcción de un mundo donde independientemente del sexo, seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres porque hay que reconocer que la plena igualdad de oportunidades y acceso, hace una sociedad más justa y democrática.