Fue asesinada frente a su hijo: Justicia para Edith

23 Septiembre 2019

La primavera llegó y una mujer apagó su vida en manos de un cobarde asesino, que como una rata se oculta del resto del mundo en la oscuridad, porque su valentía se terminó ese día que tuvo el coraje de matarla, cuando indefensa junto a su hijo luchó hasta el último minuto.

Ada Angélica Rivas >
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Antes de llegar la primavera, vi que la sonrisa florecía por tu boca y tus ojos. Porque estabas más linda que nunca, porque tu actitud hablaba más que las palabras. Las últimas veces que nos encontramos no fue en el terminal del Agro donde trabajabas, vendiendo maravillosos frutos de la madre tierra; fue en una tienda en que mirabas ropa de temporada, porque el sol ya anunciaba cambios.

¿Qué proyectos circulaban en tu mente? No los supe, pero sí delataste estar mejor que en mucho tiempo, y me alegré por ello, al saber que tu vida de trabajo constante y de mucho sacrificio estaba mostrando frutos.

Dentro de tus planes ineludibles se encontraba tu pequeño Josué, de sonrisa interminable, que te acompañaba todo el tiempo, hasta el último día, en que te vio caer rendida, no sin antes luchar por seguir en este plano de vida.

Sin palabras de mucha coherencia escribo, pensando en la muerte de Edith Lázaro, una tremenda mujer que conocí y frecuenté con intervalos, pero siempre conectada con su alegría, porque triste nunca la vi.

Hoy solo interesa que su muerte a manos de un criminal asesino, sin compasión, no quede impune. Que la justicia haga lo suyo y nos muestre de cuerpo entero a quien sin piedad, ni respeto por su pequeño hijo, que almacenó en su memoria momentos horrendos, pague su culpa. Que la justicia nos deje el sabor de la misión cumplida, porque una madre como Edith, no puede morir porque alguien lo decidió.

La primavera llegó y una mujer apagó su vida en manos de un cobarde asesino, que como una rata se oculta del resto del mundo en la oscuridad, porque su valentía se terminó ese día que tuvo el coraje de matarla, cuando indefensa junto a su hijo luchó hasta el último minuto… Las razones existentes no tienen eco en esta muerte violenta e inesperada.

Justicia para Edith, que este caso no quede sin resolver, porque su sonrisa vuela en el recuerdo y se transmuta en la tristeza que nunca vi en ella.

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