¿Mentorías para cambiar tu vida?: "De una líder nace otra"

A principios de año, un grupo de mujeres vivimos un momento importante en nuestra formación como mujeres líderes, profesionales y ciudadanas. En Santiago, “cerrábamos” nuestro proceso de participación en la 17 versión del programa de Mentorias iniciativa impulsada por Comunidad Mujer. Hoy quisiera compartir con ustedes mi proceso de Mentorias con enfoque de género, espacio importante para el desarrollo de nuevos liderazgos femeninos y que hoy más que nunca necesita Chile y sobre todo en las regiones como Arica y Parinacota, porque no cabe duda que DE UNA LÍDER, NACE DE OTRA.

Hace algunos años, había escuchado hablar del Programa de Mentorias de Comunidad Mujer, busqué información y quedé encantada con tener la posibilidad que se habría ante mis ojos. Lamentablemente en ese tiempo no fue posible participar a pesar de los intentos que hice, sin embargo, creo que valió la espera, y vivirlo ahora con más camino recorrido en materia laboral tiene mayor sentido, ya que ahora tengo claridad de lo que quiero y no quiero hacer, y en este momento es fundamental para mi trazar una trayectoria profesional, asumir nuevos desafíos asociados al liderazgo en otros espacios, o por qué no, emprender en aquello donde no todavía nadie ha llegado ni siquiera a pensar, porque así son las Mentorias, una sabe desde dónde parte, pero jamás donde va a terminar. Así que me puse en movimiento, me arriesgué, asumí el desafío y a ojos cerrados me lancé en esta nueva experiencia.

Ahora bien, Chile vive un contexto social complejo que necesita de mujeres valientes que se la jueguen en todos los espacios posibles, es aquí donde las Mentorías se transforman – Como diría Comunidad Mujer - en una herramienta poderosa para el nacimiento de nuevos liderazgos femeninos, liderazgo que se construyen y fortalecen desde trabajo mancomunado, permanente y comprometido con otra y entre otras. En 2019, el estallido social nos dejo un futuro lleno de incertidumbres, pero también nos humanizó permitiéndonos dar un paso firme para reencontrarnos, confirmando la corresponsabilidad que tenemos y dejándonos abierta la posibilidad de profundizar en nuestras demandas con nuevas respuestas. Así lo confirmó Jessica González, directora del Centro de Liderazgo de Comunidad Mujer en el cierre de este proceso “El  2020 es el año de paridad, un año importante para el protagonismo de las mujeres, en este tiempo del estallido social las mujeres se tomaron el debate por medio del colectivo “Las Tesis” que ha traído una canción, una  reflexión, un relato de dolor que ha dado vuelta al mundo, que se instala en diferentes ciudades y en distintos idiomas pero con necesidades comunes. De ahí que el Liderazgo de las mujeres en este contexto es crucial, es importante, es imprescindible”.

Pero el desafío que nos comparte Jessica y que se trabaja en las Mentorias habla precisamente que este camino no podemos hacerlo en solitario, debemos hacerlo junto a otras que ya han comenzado su recorrido y tienen experiencia parecidas a las nuestras. Muchas de ellas aprendieron del fracaso que las llevó a perseverar en su sueño, otras muy valientes, cambiaron de rumbo y hoy destacan por ser expertas en temáticas que nunca imaginaron desarrollar. Es en este espacio, donde la orientación entre pares nos abre el mundo a nuevas posibilidades, un mismo espacio donde dos personas se reúnen para aportar en el desarrollo mutuo, para motivarse, para hacernos recuerdo de aquellas fortalezas que habíamos olvidado, y sobre todo a profundizar en ese valor agregado que cada una tiene al ser única e irrepetible, por tanto no cabe duda que DE UNA LÍDER, NACE DE OTRA.

Por eso, hablar de Mentorías es sinónimo de acompañamiento entre dos, Comunidad Mujer habla de un “proceso donde un mentor/a y una mentoriada se embarcan en una aventura donde definen objetivos de trabajo, desafíos de cambios y proyecciones, ya sea para el desarrollo de carrera o creación y/o fortalecimiento de emprendimientos asociados (que declara la mentoriada). Instancia  donde se facilita el despliegue de capacidades y competencias, a su vez, contribuye a la transferencia e intercambio de conocimientos, experiencias y buenas prácticas, además de construir redes”. 

Por eso, podríamos hablar de sus interminables beneficios, sin embargo quisiera rescatar los que yo más he reconocido y valorado:

-        Facilita la orientación laboral o profesional.  

-        Mejora y aumenta la red social. 

-        Mejora el desarrollo emocional. Ya que ayuda a tener más confianza consigo misma,  ayudando a mejorar la autoestima y autonomía.

-        Amplia la conciencia de competencias y habilidades personales y profesionales

-        Fortalece capacidades y supera dificultades. 

Para mi satisfacción y orgullo, mi mentora fue la querida Paula Forttes trabajadora social, seca en temas políticas sociales vinculadas a adultos mayores, persona con gran calidad humana, con capacidad de ver más allá de lo que le contaba y poder canalizar de buena manera, toda esta energía que traía para soñar en grande, para atreverme a salir de la zona de confort y tomar acción, donde más allá del temor, la angustia o futuro incierto, siempre podremos crear nuevas y mejores oportunidades para el desarrollo personal que repercutirá de manara significativa en el desarrollo de la comunidad, gracias Paula por todo esto!

Vivir este proceso de mentoria ha sido un regalo y el enorme privilegio que pude tener gracias al esfuerzo de muchas voluntades. Sin duda, mi paso por este espacio genera en mi un mayor grado de responsabilidad y compromiso de lo que viene por adelante, tanto con en mis proyectos personales y también profesionales, especialmente en regiones donde hay mucho por hacer y  aportar al trabajo colectivo, gracias Comunidad Mujer!!!

Hoy más nunca, debemos re-doblar nuestros esfuerzos para reunirnos, conocernos y reconocernos, compartir nuestros sueños, nuestros miedos, nuestros anhelos más profundos que tenemos en el corazón, seguramente en el camino logramos dilucidar cuál es el objetivo común que nos une, que nos hace más fuerte y que nos permitirá soñar y aportar de manera concreta al desarrollo de nuestro entorno. Un espacio donde podamos aportar, aprender y construir un objetivo que será mayor a nuestras propias fuerzas y que por tanto, trascenderá en el tiempo, porque se confirma, DE UNA LÍDER, NACE DE OTRA.

Yo ya estoy en el camino… y tú?