Miles de peregrinos que van a la Virgen de Las Peñas no se mojarán los pies para cumplir sus “mandas”

Tradicionalmente, el 8 de diciembre de cada año miles de peregrinos de todo Chile llegan hasta el norte de nuestro país para dirigirse al Santuario de la Virgen de las Peñas para pagar sus 'mandas'. Sin embargo, para llegar debían mojarse los pies al pasar por los cruces de la ribera del río San José, en la escarpada quebrada de Livilcar.

Sin embargo, esto cambiará. Así lo afirmaron la intendenta Gladys Acuña y el diputado Luis Rocafull, quienes llegaron junto a representantes del Alferazgo del Santuario de la Virgen de Las Peñas y la Asociación de Bailes Religiosos a la quebrada de Livilcar, con la misión de instalar los ocho necesarios puentes de madera para estos criuces. 

Miguel Zegarra, representante de los bailes religiosos, afirmó que esto fue posible gracias al aporte de un particular, que donó fondos para confeccionar los puentes, lo que mejorará el cruce de la ribera del San José, donde "muchos adultos mayores sufrieron algún tipo de percance al momento de cruzar el río”, según destacó.

A la vez, la intendenta Gladys Acuña, valoró el trabajo colaborativo realizado en la quebrada de Livilcar: "Hoy se materializó la reparación y confección de nuevos puentes del sendero que recorren los peregrinos” gracias a una reunión previa sostenida en la Intendencia, donde se expuso la necesidad de contar con mayor seguridad para los peregrinos que este año llegarán a visitar a la virgen”.

Finalmente, gracias al trabajo mancomunado entre devotos y autoridades, se han habilitado 25 cruces del río, lo que mejorará en gran medida la seguridad de los más de 50 mil peregrinos que llegan cada año hasta esta zona.