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Los niños de ahora se comunican entre sí con aparatos que nunca existieron en mi infancia y estoy segura que muchos de ellos cuando les dijeron que no podían salir de la casa entraron en modo virtual muy contentos y felices. Pero, qué es lo que queremos que recuerden en 15 años más cuando sean adultos y hagan memoria de este momento que ha marcado nuestra historia y su infancia, algunos recordaran tareas, retos y frustración, otros quizás (y los más gamers puede que no vean el problema) pueden recordar que jugaron su videojuego preferido o usaron el tablet hasta aburrirse, pero podemos todos estar de acuerdo en que será un momento que marcará la vida de todos y que sería mucho más beneficioso aprovechar esta situación para conocer mejor a los niños que tenemos cerca, aprender de ellos y recordar nuestro niño interno volviendo a ver el mundo como cuando teníamos 5  o 6 años

Compartiré algunos consejos que creo pueden ser útiles cuando de abordar mejor esta situación con los niños se trata:

1. Los niños se preocupan más si les ocultamos información, dar información adecuada a su nivel de desarrollo, es mejor no tener miedo de comunicarles lo que está ocurriendo, obviamente seremos nosotros quienes filtremos esa información por lo que debemos comunicarles sólo información verídica, manteniendo siempre la calma y generando un espacio de confianza, recordando siempre no abrumar con información innecesaria, en cambio tratar de responder a sus preguntas (no es necesario saber siempre qué responder, lo importante es estar ahí para escucharles) pero si es importante utilizar palabras reconfortantes y hacerles saber que cuentan con nosotros.
   
   
2. Converse con ellos sobre el coronavirus y cómo se sienten al respecto, dele espacios y oportunidad para que hagan preguntas, así evitamos alimentar fantasías y pensamientos mágicos alarmantes.
   
   
3. Mantener la calma, es mejor tomarse un momento para calmarse antes de tocar este tema con los niños y evitar hablarlo si nos sentimos intranquilos o con miedo.
   
   
4. Prevención y estructuras, los niños se sienten más seguros cuando saben qué hacer para protegerse y tienen rutinas que les permiten organizar su mundo mentalmente, esto manteniendo horarios de sueño y rutinas que marquen los momentos y actividades del día de manera realista, permitiéndole tener espacios tanto de trabajos como de esparcimiento y juego libre.
   
   
5. Recordar que los niños son importantes vectores de esta enfermedad, aunque a ellos se les presente de manera leve. Por lo que es fundamental mantener sus vacunas al día y mantenerlos alejados de personas que puedan tener algún riesgo mayor de complicación. Sin embargo, no olvidar que, para los más viejitos, saludar o saber de su nieto puede ser algo que le alegre el día por lo que es importante no perder la comunicación y el contacto por otras vías.