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El Gobierno anunció un paquete de 10 medidas para promover la competencia e impulsar el crecimiento económico, las que se unen a la agenda de 50 medidas anunciadas por el gobierno en junio de2011.

Este paquete en términos generales es positivo y se refiere a la modificación o eliminación de regulaciones que hoy entorpecen el emprendimiento y que han sido identificadas en reiteradas oportunidades por los expertos como “cuellos de botella” del desarrollo.

No obstante, para que cumplan eficazmente con su objetivo, es indispensable que en diseño específico de las reformas se concreten los cambios profundos que se requieren, para lo cual será necesario enfrentar las presiones sectoriales que, previsiblemente, surgirán en contra de algunas de ellas.

Las medidas anunciadas se refieren a distintos ámbitos de la economía. En lo laboral, cabe destacar la propuesta de flexibilización de las normas de contratación de los jóvenes entre 15 y 24 años, para que les sea posible compatibilizar sus estudios con el trabajo.

En el segmento la participación laboral es sólo de un 24%, y la rigidez de la legislación coloca a los jóvenes en la disyuntiva de estudiar o buscar empleo, siendo la primera muchas veces difícil de seguir, por el impacto que causa al ingreso familiar.

En el ámbito de la minería resulta interesante la propuesta de impulsar la industria del litio, por la vía de eliminar las restricciones que hoy existen. En ese sentido, más que apuntar a contratos específicos, debería abordarse derechamente la eliminación de las limitaciones existentes para que el litio sea objeto de concesiones mineras sujetas a las reglas generales, las que a todas luces son anacrónicas y sin fundamento que las justifiquen.

En lo que se refiere a las normas que afectan más directamente el emprendimiento, se plantea una vez más la modernización de la organización del sistema de conservadores y notarios, materia en la cual lo que se echa de menos es la materialización de los cambios legales y administrativos que se han anunciado en reiteradas oportunidades. También se plantea revisar las reformas requeridas para facilitar la competencia en el mercado de los medios de pago electrónico, área relevante para la optimización de las transacciones comerciales.

Un aspecto positivo de esta agenda es que se pone la fecha de diciembre de 2010 como meta para la total implementación de las 10 medidas que contiene.

Esa fecha debería ser también el límite para que se concrete el primer paquete de 50 medidas anunciadas por el gobierno, algunas de las cuales parecen haber perdido el impulso inicial, como el caso de la que proponía la eliminación de las normas que hoy reservan el transporte de carga y de pasajeros entre puertos nacionales  a las naves de bandera chilena.  El gobierno parece haber desistido de esta reforma ante los reclamos de sectores afectados y de la oposición formulada por parlamentarios de distintos sectores.

La posibilidad de mantener altos niveles de crecimiento económico dependen, en buena medida, de que se genere un ambiente favorable a la inversión y al emprendimiento, para lo cual las reformas necesarias deben hacer prevalecer el bien general por encima de intereses de sectores determinados.

Fuentes: La Tercera, CNN